El delegado de Desarrollo Sostenible en Córdoba, Giuseppe Aloisio, ha informado de que la Junta de Andalucía ha culminado la reparación o construcción de 30 gallineros afectados por la presencia del lince ibérico, dentro del proyecto de prevención de daños a ganadería por lince ibérico y reducción de mortalidad de la espacie, mediante adecuación de gallineros en su área de distribución de Guadalmellato, que se iniciaron en diciembre del pasado año. Según ha indicado la Junta, en una nota, para la puesta en marcha de los trabajos, se suscribieron convenios de colaboración entre la consejera Carmen Crespo, y los titulares de los terrenos o explotaciones afectadas.

Como ha explicado Aloisio, «con este proyecto se realizan los trabajos necesarios para acondicionar y adecuar estos gallineros existentes en los términos municipales de Adamuz, donde se concentra la gran mayoría, Villafranca de Córdoba y Montoro, todos dentro del área de distribución del lince ibérico de Guadalmellato». El proyecto se ha llevado a cabo mediante encargo a la empresa pública Tragsa, cuenta con un presupuesto de 78.839,26 euros y para su ejecución se han empleado a cinco trabajadores de la zona. 

El delegado ha detallado que los trabajos consisten en soluciones específicas para cada caso en particular como instalación de viseras, pastores eléctricos, puertas, guillotinas de acceso, refuerzo o sustitución de malla, instalación de techado, o poda de la arboleda perimetral del gallinero, «que impedirán el acceso de ejemplares de lince ibérico a su interior. Asimismo, en algunos casos se instala un modelo de gallinero diseñado específicamente para este proyecto, adaptado a la explotación».

Tras el inicio del programa de reintroducción del lince ibérico en el valle del Guadalmellato en el año 2009, paralelo al asentamiento de ejemplares de esta especie, se detectaron a finales de 2011 los primeros ataques a gallineros. Hasta ahora, solo se había podido paliar el problema con diálogo con los propietarios de los gallineros, aportando cierto material, algo de malla o alambre, para que éstos acometieran pequeños arreglos necesarios.

Aloisio ha explicado que «con estas actuaciones que lleva a cabo la Consejería se conseguirá evitar dichos ataques y las posibles lesiones a los ejemplares de esta especie por entrada a los gallineros. «El arreglo de gallineros se ha mostrado como la única herramienta eficaz y capaz de paliar el problema a largo plazo», ha dicho. Cuatro linces localizados en Andalucía se encuentran asentados en esta zona, donde ocupan ya más de 1.000 kilómetros cuadrados