Córdoba Ecuestre lleva más de 20 años difundiendo y defendiendo la cultura del caballo y todo lo relacionado con ella a nivel nacional e internacional. El espectáculo Pasión y duende del caballo andaluz ha sobrepasado las fronteras nacionales y se ha convertido en el elemento más dinámico de la Marca Córdoba al codearse con las escuelas de equitación más importantes del mundo. El espectáculo ha llevado el nombre de Córdoba a Viena, Roma, París, Budapest (donde representó la Marca España), Saumur, Jadida, Avignon, Lípica, etcétera, actuando en Córdoba con importantes escuelas internacionales como la Escuadra Ecuestre Palma de Peñaflor, de Chile, y la Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre de Jerez.

La Asociación Córdoba Ecuestre se constituyó el 30 de diciembre de 1996. En sus orígenes se trató de una organización de naturaleza asociativa y sin ánimo de lucro que nació con la finalidad de aunar los intereses e iniciativas de todos los colectivos y particulares relacionados con el mundo del caballo en Córdoba y su provincia, un espíritu que todavía sigue en la actualidad vigente.

Hoy, Córdoba Ecuestre es la institución más dinámica y constante del turismo cordobés, al desplazarse a cualquier lugar y ser uno de los pilares fundamentales del atractivo nocturno de la ciudad. La asociación ha revitalizado y llenado de contenido, a nivel internacional, las Caballerizas Reales.

Para el presidente de la asociación, Rafael Blanco, esta distinción llega «en un momento muy importante, ya que se está debatiendo tanto el futuro de las Caballerizas Reales como el de sus usos y el papel que jugará en ambos Córdoba Ecuestre». Tras conocer la concesión del premio, Blanco sintió «una gran alegría», según sus palabras, puesto que supone «un reconocimiento a más de 20 años de defender la cultura del caballo y también a las Caballerizas. Tarea que no siempre ha sido fácil y siempre ligada a la Marca Córdoba».