Todas las recetas de ajo blanco y gazpacho blanco que conozco cuentan con una base común: ajo, aceite de oliva, sal, miga de pan, vinagre y agua. Las cantidades de los ingredientes oscilan de unas a otras. La diferencia fundamental reside en que el gazpacho blanco lleva huevo crudo y el ajo blanco, no; éste último, en cambio, lleva almendras, que el gazpacho puede o no llevar; incluso, en ciertas zonas, sustituye las almendras por harina de habas secas; algunas recetas modernas ponen piñones tanto en el ajo como en el gazpacho. Personalmente, prefiero el ajo blanco al gazpacho, sobre todo, en verano.

Y ésta es mi receta: 200g de almendras peladas, 3 dientes de ajo, sal gorda, 200g de pan --mejor del día anterior-- 100g de aceite, 1 cucharada sopera de vinagre de vino y un litro y medio de agua muy fría. Como guarnición --hay quien lo prefiere sin ella, bebido sin más-- pasas o uvas moscatel o bolitas de melón o daditos de manzana o pepino. Nunca más de dos cosas.