La cantaora Mayte Martín maravilló ayer en la penúltima gala del Festival Internacional del Cante de las Minas con su dominio de los palos flamencos, en una muy buena noche de cante jondo que cerró la onubense Argentina María López, presentando su último disco, La vida del artista.

Martín tuvo una gran acogida ayer en La Unión, quien demostró su dominio de la antología flamenca, tanto en conocimiento como en ejecución, comenzado con un par de granaínas y una cartagenera, con la que obtuvo la Lámpara Minera en 1987, y que enardeció a parte del público unionense, muy agradecido con los artistas que, fuera de concurso, apuestan por los cantes de Levante dentro de su repertorio.

La cultura musical, su voz larga, sinuosa y detallista sin olvidar su sentido del compás, marcaron la actuación de Martín, que estuvo acompañada a la guitarra por Salvador Gutiérrez.