"El presente es para siempre y la vida es ahora". Esta frase se ha convertido en bandera para Manuel Angel Mart, líder y cantante del grupo cordobés Estirpe, que anuncia con toda "la ilusión, la energía y la emoción del mundo" la vuelta de la banda a los escenarios, tras un paréntesis de más de año y medio provocado por una cruel e inesperada enfermedad a la que el músico ha ganado el pulso.

El último disco de la banda, Neurasia (2013), centrará sus próximas actuaciones --que comienzan el 5 de septiembre en Zamora-- porque "es el trabajo que hay que defender" ya que, aunque "se ha rodado y se conoce", el parón llegó a los tres meses de salir al mercado, tras presentarlo en México y Los Angeles, en febrero del 2014. "Fue allí donde empecé a sentirme mal y temí no poder hacer los conciertos", recuerda el cantante, que al llegar de vuelta a España recibió el duro diagnóstico: cáncer de colon. "Ignorante de mí, creí que me recuperaría en un mes, y le dije a mis compañeros que habría que suspender la próximas actuaciones. Pero ellos vieron claro que había que abandonar toda la gira". Esos duros momentos han quedado atrás y ahora todos, "especialmente Loren, que es como mi hermano", están muy ilusionados con la vuelta a los escenarios, aunque Córdoba tendrá que esperar, posiblemente, hasta el próximo año. "Loren y yo hemos crecido juntos, hemos sufrido, hemos llorado, hemos reído" y es el único miembro, junto con Mart, originario de la banda, a la que ahora se unen Paco López, al bajo, y Miguel Fuentes, a la batería.

"Pero, lo que es la vida, se cierra una puerta y se abren cuatro ventanas", continúa el cantante, que asegura que "estamos en nuestro mejor momento y ante el mejor disco de la larga trayectoria de la banda, porque el hecho de llevar tantos años en esto te hace más maduro, saber lo que quieres, estamos en un punto espléndido", que, en parte, le deben a Víctor Verdejo, su manager personal. "Para mí, ha sido una luz, es de las personas que quieres tener cerca. Nos ha animado mucho y se ha lanzado con nosotros en esta historia. Tenemos un gran equipo", dice casi con emoción Mart. Además de Neurasia --"es mi obra y se lleva muy bien en directo, son canciones que animan a la gente a que participe", dice--, los fans de la banda también volverán a escuchar en directo, en con ese estilo tan personal de Mart en el escenario, los temas más emblemáticos del grupo, cuyos comienzos se remontan a 1992, cuando nació un "hobby de adolescencia" que acabó convirtiéndose "en un objetivo y una forma de vida", algo que no es extraño siendo hijo de Manuel Martínez, el cantante de la legendaria banda Medina Azahara.

UN MOMENTO ESPLENDIDO Reconoce que, aunque en este tiempo no ha salido del estudio produciendo trabajos para otras bandas, no ha compuesto nuevos temas: "Este tiempo lo he pasado, sobre todo, reflexionando. Todavía no me creo lo que ha ocurrido, lo que he vivido, lo recuerdo todo como si fuera ayer, pero ya pondré orden en mi cabeza".

Ante la inminencia de subir de nuevo a un escenario, cree que tanto para él como para sus compañeros será algo "muy emocionante". "Ha sido muy duro, lo hemos pasado todos muy mal, y no será el mejor concierto de nuestra vida pero seguro que habrá magia", vaticina Mart, que agradece "el cariño que he recibido por parte de mis compañeros músicos, todos se han preocupado mucho por mí" y reconoce que salido "fortalecido" de este duro proceso y, "sin miedos", ha aprendido una importante lección: "Lo que es real es el ahora y la salud, lo más importante de nuestra vida".