La Facultad de Ciencias de la Universidad de Córdoba puso punto y final ayer a la sexta edición de su ciclo de conferencias con la charla Cómo el sexo transformó la vida, desarrollada por el catedrático del área de Zoología de la UCO Juan Carranza Almansa. Este ciclo está organizado por la Comisión de Investigación de dicho centro, con el principal objetivo de fomentar la cultura científica y presentar, de manos de sus protagonistas, los principales avances científicos en diferentes materias. Para ello, desde el pasado 21 de febrero, con la docente Teresa García Martínez y su conferencia Usos biotecnológicos de biocápsulas de levaduras daba comienzo esta sexta edición, la cual ha contado con la participación de un total de 8 expertos en materias científicas, como Luis Parras, profesor del departamento de Química Agrícola y Edafología; Alberto Marinas, docente del área de Química Orgánica; o José Ignacio Fernández, profesor del departamento de Física, entre otros, a lo largo del segundo cuatrimestre del curso.

Así, el catedrático Juan Carranza abarcó ayer cuestiones tales como el comportamiento animal, más específicamente temas reproductivos o de apareamiento, repasando lo que se conoce como «la existencia de la reproducción sexual como alternativa a otro tipo de reproducciones, como la asexual». Así, Carranza trató cómo el hecho de que haya reproducción sexual hace que aparezcan dos sexos, cuáles son las estrategias de cada uno y cómo afecta a los hábitos de vida de los dos modelos, resaltando que «macho y hembra se construyen con los mismos genes, con las pequeñas diferencias que están en los cromosomas sexuales, aunque la inmensa mayoría del material genético que poseen es el mismo», una cuestión «clave» según el experto en Zoología.

Del mismo modo, el catedrático resaltó como los genes «a través del paso por generaciones y cuerpos de hembras y machos acaban siendo sometidos a procesos de selección diferentes», muchas veces «antagónicos entre ellos». Lo que lleva a una serie de consecuencias «desconocidas muchas veces», como el hecho de que machos y hembras maduren sexualmente a diferentes edades. También, Carranza quiso destacar cómo «buena parte de la selección natural que ha estado operando a lo largo de la evolución de la especie humana ahora se está debilitando significativamente», desvinculando cuestiones biológicas al éxito reproductivo y siendo cada vez más alterado por «cuestiones sociales», entre otros muchos temas centrados en sus investigaciones especializadas en el comportamiento del ciervo, pero «de manera más divulgativa» y ejemplificada con el ser humano.