Sara Villafuerte es profesora de música en el colegio Laureado Capitán Trevilla, de Adamuz.Amante de la guitarra, es la voz y compositora del grupo Sara Banda, ganador del concurso de música underground por la igualdad de género del Aula de Rock de la UCO, gracias a su canción Mariposas. Sara Banda comenzó dando forma a sus canciones, a guitarra y voz, que componía desde la adolescencia, con el chelo de Rodrigo García y la percusión de Virginio García. Más tarde, tocando y probando nuevos sonidos, sumaría a otros músicos, como Valentín Puebla y Eles Bellido. El pasado año se unieron las voces y percusiones de Sandra, Lola, Isa y Lydia, integrantes del grupo de batucada Odara. Así, su música va caminando y buscando amigos que la acompañen.

-¿Cómo fueron los inicios de Sara Banda?

-En la Facultad de Magisterio de Córdoba comencé a cantar para el público, llevando luego mi música a numerosos locales de la ciudad, así como a actos culturales y solidarios. Tocando con quien se acercaba a mi camino, decidí grabar mis canciones en un disco llamado Sueños sin prisa, disponible en la plataforma Spotify o en los conciertos. Así sigo haciendo canciones y dándoles forma con los músicos que voy conociendo.

-¿Por qué se decidió a participar en este concurso?

-El año pasado me ofrecí para tocar en un acto contra la violencia de género, llamado Zapatos rojos, con la canción Mariposas. Desde entonces, he pensado en moverla para que la sociedad se concienciara de este tema tan importante. Siempre que la canto, emociona. Entonces la presenté a este concurso del Aula de Rock y me llevé una gran alegría con la llamada de Javier Estévez para avisarme de que era la premiada, ya que mi papel era mostrar la fuerza de las mujeres en el mundo y el de la música, también.

-¿Qué le ha supuesto que su canción haya sido la premiada?

-Un reconocimiento externo siempre te ayuda a sentirte más segura y a hacer visible el trabajo. La gente que me quiere me anima a seguir, y ahora con más fuerza. Además, estas actividades son muy importantes para abrir puertas a artistas locales.

-¿Cómo fue la composición del tema?

-Mariposas es una de esas canciones que empecé y acabé como si la tuviera pensada de antes. Me vino la idea y la dejé salir de manera natural. Quería usar una metáfora con las mariposas, y además hacer una canción fuerte con guiños al flamenco, pero que su estribillo fuera como un himno que marcase a quien la escuchara.

-¿Por qué ese título?

-Las mariposas suelen parecer tan bellas como frágiles y destacar que deben volar solas, valientes y ligeras, sin esperar que nadie las atrape y engañe. Además, las mujeres tienen un rol de género del que deben salir, como ya se está haciendo, desarrollándose de manera propia y sin responder a encasillamientos. Ahí es muy importante la labor de sus acompañantes. Por eso, la canción dice «que acompañes a una mariposa que no pueda volar hasta que coja fuerza y así no dejes que llore ni se marchiten sus alas».

-¿Cree que la música puede ser una herramienta para luchar contra la violencia de género?

-No se puede consentir que las muertes de mujeres llenen los telediarios. Hay que incidir mucho en la desigualdad que aún existe. La mujer debe saber que ella es libre y no tiene que ser esclava de su pareja y de su casa. Y con la música lo veo importantísimo porque escuchamos de forma natural las letras sexistas de cualquier música. Hay que hacer llegar a la gente mensajes de igualdad. Y de ahí que siempre pienso qué pocas mujeres son destacadas en el mundo de la música, habiendo a montones.