Álvaro Prados es un estudiante del tercer curso de Medicina, que se ha proclamado ganador del primer premio del foro internacional Elsevier Hacks junto a su equipo integrado por cuatro alumnos de diferentes nacionalidades. Este certamen, organizado por la editorial científica Elsevier y la empresa BEMyApp y que acaba de celebrarse en Helsinki, distingue proyectos innovadores relacionados con la Medicina y, en concreto, la formación didáctica de esta disciplina.

-¿En qué consiste su proyecto?

-Es un simulador virtual de un paciente. Con él buscábamos dotar a los estudiantes de Medicina y médicos recién egresados de una herramienta para practicar en un entorno seguro y poder aprender ejerciendo. En concreto, le hemos dado la forma de un chatbot, un robot con el que mantienes una conversación a través de un chat y que te contesta devolviendo información en multitud de formatos, desde un simple texto a una imagen como resultado de una prueba diagnóstica. Está pensado para que sea cada universidad u hospital la que adapte el contenido de los casos clínicos de acuerdo a sus necesidades. Lo bueno es que permite al estudiante evaluar su conocimiento y practicar la toma de decisiones y, a las instituciones, poner a prueba sus planes de estudios valorando el nivel general alcanzado por sus estudiantes y también el de cada uno en particular.

-¿Cómo surgió la idea?

-Para ser sincero, la idea surgió por combinación de varias soluciones que teníamos en mente. Por un lado, yo tenía claro que la clave estaba en dotar al estudiante de la autonomía de la que carecemos durante la carrera, y es que además de formarse en el ámbito teórico hay que aprender a ponerlo en práctica y, más aún, a tomar decisiones ya que al final eso es lo que se nos va a exigir. Siendo estudiante no decides qué estudios realizar a un paciente o qué tratamiento pautar y sin duda esto convendría practicarlo de forma segura. En este sentido nos reunimos estudiantes de medicina con similares inquietudes y también con un desarrollador informático que tuvo la idea de hacerlo en chat, algo muy acertado ya que permite recrear la conversación médico-paciente a lo largo de cada una de las etapas del proceso diagnóstico y terapéutico integrando otras funcionalidades como las pruebas diagnósticas y un feedback al terminar el caso, que es a la par informativo e instructivo.

-Su equipo se componía de otras cuatro personas más, una de Tailandia, otra de Australia y dos de Holanda. ¿Cómo surge este grupo tan internacional?

-Todos los equipos eran internacionales. Al fin y al cabo, los estudiantes de Medicina fuimos seleccionados de todo el mundo y yo era el único español. Los equipos eran de hasta 6 personas y en ninguno había más de dos que compartieran país.

-¿Cómo ha sido el trabajo en equipo siendo de países tan diferentes?

-Bueno, es que en definitiva todas las distancias o barreras que pudiera dejan de existir cuando se tiene un objetivo común y tan poco tiempo para llevarlo a cabo. Como he dicho antes, es muy enriquecedor y productivo integrar puntos de vista y experiencias diferentes en el mismo equipo.

-¿Qué supone para usted haber recibido este premio?

-Personalmente, más que con el premio me quedo con lo que me ha supuesto vivir esta experiencia. Ha sido algo verdaderamente único, sobre todo también porque este tipo de foros pertenecen más al mundo de la tecnología o la informática. Lo mejor de todo ha sido conocer a gente brillante de todo el mundo con quienes comparto inquietudes y, con muchos de ellos, también profesión en un futuro. Al final, para mí la universidad va mucho más allá del grado concreto que cada uno estudie y eventos así me reafirman en mi postura.

-Se encuentra en su cuarto año de Medicina. ¿Cómo afronta los años que le quedan de formación tras haber recibido este reconocimiento?

-En cuestión de tres días estaré en Polonia para cursar mi cuarto año de Erasmus en la Universidad de Wroclaw. En principio no creo que este reconocimiento cambie drásticamente la forma en la que espero seguir viviendo la universidad entre cursos, proyectos y experiencias de todo tipo, aunque es cierto que me encantaría seguir formándome en el ámbito tecnológico y, por supuesto, encontrar tiempo para seguir trabajando con mis compañeros en el proyecto.