La doctora Carmen Viejo es profesora en el departamento de Psicología de la UCO. Como investigadora del Laboratorio de Estudios de Convivencia y Prevención de la Violencia, participa actualmente en el proyecto Europa2038: la voz de los jóvenes.

--Forma parte del Laboratorio de Estudios Sobre Convivencia y Prevención de la Violencia, ¿cuál es su finalidad?

-Es un grupo de investigación dirigido por Rosario Ortega-Ruiz que cuenta con más de 20 investigadores e investigadoras de universidades españolas e internacionales. Tiene una larga trayectoria en estudios sobre el análisis de las relaciones interpersonales de chicos y chicas en edad escolar y juvenil. Particularmente relevantes son los estudios en torno a temas como la convivencia escolar, el bullying, el cyberbullying, o de riesgo de violencia en las primeras relaciones sentimentales. Estos trabajos siempre nacen desde una perspectiva educativa, poniendo énfasis en el análisis de elementos que nos permiten trabajar para mejorar las relaciones sociales.

--Actualmente, participan en un proyecto sobre la Europa del año 2038, ¿en qué consiste?

-Dos investigadoras de este equipo (Rosario Ortega y yo) junto a una alumna de doctorado (Mercedes Gómez), estamos participando, junto a otros seis países europeos, en un proyecto del programa H2020 liderado desde Austria. Este proyecto, titulado Europa2038: la voz de los jóvenes trata de recabar las opiniones, preocupaciones y propuestas de los jóvenes de hoy sobre lo que será su futuro como ciudadanos de la Europa de 2038. El objetivo es darles voz para que llegue no solo a la sociedad, para lo que hay previsto un plan de difusión de resultados en los siete países participantes, sino también a los líderes europeos a través de la redacción de la Declaración Europa 2038 que será presentada al Parlamento Europeo.

--¿Cómo surgió la idea de llevar a cabo esta investigación?

-Como decía, este proyecto nace y se lidera desde Austria. A nosotras nos llega la invitación a participar en él antes de ser solicitado. Pese a ser conscientes de la ambiciosa propuesta, la encontramos tan interesante y necesaria, que no pudimos dejar de aceptar participar en ella. Afortunadamente, resultó concedida por la Unión Europea, quizás por ese carácter ambicioso que la define, ya que reúne las opiniones de Albania, Rumania, Italia, España, Alemania, Reino Unido y Austria. Siete países, a priori, diferentes, con realidades sociales diversas y diversos problemas; si bien todos ellos tienen un interés común, la Europa del mañana. Desconocemos qué sería lo que despertara el interés para diseñar este proyecto; pero ahora mismo no podemos dudar de lo interesante y bien estructurada que ha quedado la propuesta.

--¿Con qué objetivos se presentarán los resultados al Parlamento Europeo?

-Este proyecto está enmarcado en la acción de Europe for citizens de los proyectos de investigación europeos, subrayando así la necesidad de que el producto de este trabajo se lleve a la ciudadanía. En este sentido, no solo se espera llegar al Parlamento Europeo, sino que se espera llegar a una gran parte de la sociedad. El Parlamento Europeo representa una línea de meta ambiciosa pero necesaria. Es ahí donde deben conocer la realidad de los jóvenes europeos de hoy para poder responder a las demandas y necesidades que estos identifican y construir, así, juntos, la Europa del mañana. H