El novillero sevillano Pablo Aguado resultó cogido por el primer novillo del festejo que se celebró ayer en Las Ventas, primero de la temporada taurina 2017 en la Monumental madrileña.

Aguado fue sorprendido ya en las postrimerías de la faena de muleta cuando el animal se lo ha echado a los lomos, rompiéndole la taleguilla y dejándose sin conocimiento en el albero, posiblemente por el fuerte golpe que se llevó también en la cabeza al caer. A toda prisa ha sido conducido a la enfermería por las cuadrillas visiblemente conmocionado, y ha tenido que ser el segundo espada del cartel, el mexicano Leo Valadez, el encargado de dar muerte al novillo de una estocada fulminante.

A la espera de conocer el alcance del percance el festejo se quedó en un improvisado mano a mano entre el propio Valadez, que hacía su presentación en Madrid, y el albaceteño Diego Carretero, con utreros de la ganadería de Fuente Ymbro.