FICHA:

Se lidiaron seis astados de Toros de Mollalta, de variada presentación y juego. Primero rebrincado y sin entrega, segundo, tercero y cuarto nobles y con calidad, ovacionados en el arrastre, quinto y sexto sosos y faltos de fuelle.

Curro Díaz, cogido en su primero, al que despachó Bautista (silencio).

Juan Bautista, silencio y oreja.

Rubén Pinar, dos orejas, dos orejas y oreja.

En cuadrillas, Óscar Castellanos saludó tras banderillear al sexto.

En la enfermería fue intervenido Curro Díaz de: "cornada en región inguinal izquierda, con trayectoria ascendente con dirección a retroperitoneal de 20 centímetros que produce disección de la arteria ilíaca en un trayecto de 12 centímetros. Presenta, además, herida en mentón".

Se interviene en enfermería con anestesia raquídea con ampliación de herida para comprobación de lesiones, limpieza de la misma, colocación de drenajes y cierre. Pronóstico grave. Trasladado a Albacete.

La plaza registró un tercio de entrada en los tendidos.

La corrida comenzó con sobresalto. Curro Díaz parecía haber visto cierta luz por el pitón izquierdo del primer ejemplar de Toros de Mollalta, y después de la tanda de tanteo a media altura que el toro se tragó, se disponía a iniciar una segunda cuando el de Linares resultó arrollado y volteado.

Inmediatamente fue conducido a la enfermería con la cara aparatosamente cubierta en sangre y, aunque no se apreciaba, una cornada en la ingle izquierda, a la postre, de pronóstico grave. En la enfermería fue intervenido Curro Díaz de “cornada en región inguinal izquierda, con trayectoria ascendente con dirección a retroperitoneal de 20 centímetros que produce disección de la arteria ilíaca en un trayecto de 12 centímetros. Presenta, además, herida en mentón”.

Se le intervino con anestesia raquídea con ampliación de herida para comprobación de lesiones, limpieza de la misma, colocación de drenajes y cierre. Pronóstico grave. Fue trasladado a Albacete.

Juan Bautista acabó con el toro sin miramientos de casi entera caída.

En el plano artístico lo mas destacado de la tarde salió de las templadas telas de Rubén Pinar; sobre todo en su primero, un toro noble y con clase al que condujo largo al natural, matando de estocada entera desprendida. En su segundo, sin embargo, lo más logrado llegó por derechazos, igualmente cadenciosos aunque sin estética marcada.

En el que cerró plaza, anduvo vistoso con el capote y entregado con la muleta, a pesar de la falta de acometida de su oponente. Se arrimó con conexión en los tendidos y acabó con el toro tras pinchar de entera caída y descabello.

Juan Bautista protagonizó dos trasteos correctos sin más. A su primero le faltó fuelle, por lo que embistió rebrincado imposibilitando la limpieza en los pases. Poco que reseñar frente al quinto, noble pero sin transmisión, pese a lo que el concedieron un trofeo tras matar a la primera.

En San Fernando (Cádiz), el diestro David Galván cosechó un triunfo rotundo de cuatro orejas y un rabo y salió a hombros junto a Manuel Díaz El Cordobés y Francisco Rivera Ordóñez Paquirri, que lograron llenar hasta el “no hay billetes” este coso gaditano. Se lidiaron toros de Arcadio Albarrán, justos de presentación, nobles y manejables en conjunto.