La estatua del torero retirado Curro Romero, situada en la glorieta que lleva su nombre junto a la plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla, ha sido objeto hoy de madrugada de un nuevo acto vandálico al aparecer cubierta de pintura dorada en la zona de la entrepierna y la pierna izquierda.

El monumento del diestro de Camas ha sido atacado con pintura en repetidas ocasiones desde que fuera inaugurado en diciembre de 2001, la última vez en noviembre del año pasado, cuando apareció recubierto de pintura roja en manos y boca y con proclamas antitaurinas en el basamento de acero y el parterre sobre el que se ubica.

Las labores de limpieza las ha llevado a cabo la empresa adjudicataria del servicio de limpieza y protección antigrafiti de monumentos públicos de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla, según han informado en una nota, y la estatua ya está totalmente limpia.

El consistorio sevillano recuerda que el monumento a Curro Romero es un bien de propiedad municipal y una obra de importante valor artístico "tanto por su autor, Sebastián Santos Calero, como por su ubicación en un entorno BIC (Bien de Interés Cultural)".