FICHA DEL FESTEJO.- Cinco toros de Victoriano del Río y uno de Benjumena como sobrero -tercero-, de justa presentación y variado comportamiento. Acusaron el querer irse a tablas al final de cada faena. Destacaron cuarto y quinto. Manso el sexto.

Sebastián Castella, de azul marino y oro: casi entera algo trasera (oreja); y estocada (oreja con petición de la segunda).

Alejandro Talavante, de grana y oro: pinchazo hondo y dos descabellos (silencio tras aviso); y estocada algo caída (oreja).

Roca Rey, de verde y oro: pinchazo y casi entera caída (palmas); y pinchazo y descabello (silencio tras aviso)

En cuadrillas, saludaron tras banderillear Juan José Trujillo y Rafael Viotti

La plaza registró tres cuartos de entrada en tarde agradable.

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Extraordinaria tarde brindada por Sebastián Castella en Málaga en la que obtuvo dos orejas, una de cada toro, llegándose a pedir la segunda del cuarto, después de torear con un temple y un gusto exquisitos y bajando muchísimo la mano. La explosión del francés llegó en ese segundo de su lote, al que recibió por verónicas templadísimas, meciendo los vuelos del capote y la embestida del de Victoriano del Río. Con la muleta enseguida comenzó sobre la mano derecha por donde el toro embestía humillando a las bambas de la muleta y se iba largo tras ella, templando cada lance. Un muletazo, otro, y Castella iba poniendo boca abajo La Malagueta, en una de sus mejores tardes en el coso malacitano.

En el primero de la tarde Sebastián cortó una oreja a un buen toro de Victoriano del Río que humillaba tras la muleta del francés, que dejo una extraordinaria tanda sobre la izquierda honda y de mano baja. Antes había brindado al público desde el centro del ruedo y allí comenzó su faena con un pase cambiado por la espalda y remates por bajo. Cerró por unos bellísimos doblones por bajo para dejar una estocada algo trasera y cortó una oreja.

Rivalidad en quites, cosa que se agradece, por parte de Talavante con chicuelinas de mano muy baja y cadenciosa, y la posterior réplica del francés con el capote a la espalda muy ajustado. No terminó de conectar con los tendidos Alejandro Talavante en el segundo toro de la tarde, estuvo bien el extremeño, pero le faltó algo a la faena para que llegase al respetable. Tampoco pudo lucirse con el capote ya que el animal no tenía una embestida franca y soltaba un gañafón al final del lance.

Todo lo contrario ocurrió en el quinto, en el que el extremeño realizó una faena de más a menos basada en la mano izquierda, el pitón más potable del toro, en la que hubo naturales de gran belleza gracias al temple, la largura y la mano baja. Además, hubo doblones, pases del desprecio, que hicieron rememorar al mejor Talavante.

Se devolvió el tercero de Victoriano del Río y en su lugar salió un sobrero de Benjumea al que Roca Rey consiguió sacar un par de tandas sobre la mano izquierda de mano baja y enroscándose al animal a la cintura partiendo el olé del público de La Malagueta. Cuando el animal se vino a menos, acortó distancias el peruano sobre ambos pitones pero protestaba el de Benjumea sobre el pitón derecho, aun así, Rey, consiguió mantener el interés del público.

No quería dejarse ganas la pelea Roca Rey por sus compañeros y lo intentó en el sexto pero se encontró un animal que desde que salió de toriles tendía a huir y buscar las tablas. Comenzó por ayudados por alto la faena pero enseguida el toro le marco los terrenos en los que quería estar y allí se fue el peruano peleando por arrancarle una embestida al Victoriano. Decepción en los tendidos ante la imposibilidad de sacar faena a su lote, que con diferencias fue el peor.