El emblemático espectáculo cómico taurino del Bombero Torero y sus enanitos puso ayer punto y final a casi 90 años de historia después de una triunfal y muy entretenida actuación en la localidad ciudadrealeña de Almodóvar del Campo, que prácticamente llenó su plaza de toros.

Antes del inicio del festejo se descubrió una placa en recuerdo de la despedida del Bombero Torero, una función de mucha solera a mediados del siglo XX, un auténtico apaga fuegos para muchas ferias taurinas, que se salvaban económicamente gracias a la actuación de esta singular cuadrilla de toreros cómicos. Un espectáculo, que, en su parte seria, vio nacer a numerosos toreros, algunos de ellos importantes diestros como Antonio Chenel Antoñete, Paco Ojeda, José María Manzanares, Juan Antonio Ruiz Espartaco, José Ortega Cano, Dámaso González y Emilio Muñoz, entre otros.