Palmeras quiere poner freno a la degradación y han sido los propios colectivos del barrio los que, a través de dos años de trabajo y reuniones, han terminado un proyecto integral que empiezan a presentar a los responsables de las distintas administraciones. Hoy mismo presentarán el plan a la alcaldesa, Isabel Ambrosio. Primero, reclamando toda la ayuda posible. Segundo, un trabajo coordinado para que los recursos que se utilicen se aprovechen al máximo. Y tercero, todas las ideas que puedan para mejorar este proyecto con un total de 51 iniciativas iniciales a corto, medio y largo plazo.
El eje del programa, según explican sus promotores, tiene cuatro grandes áreas: participación, infraestructuras, asuntos sociales y, sobre todo y como base de la iniciativa, la educación. «Lo tenemos claro, la educación es la única forma de salir del pozo», de la postración que se vive en el barrio y que la crisis ha agravado los últimos años, explica el presidente de la asociación vecinal Unión y Esperanza, Luis Maya.
Pero, cuando se habla de educación, no se piensa ni mucho menos en un programa puntual, como el de lucha contra el absentismo institucional o los de otras asociaciones en el barrio (Adsam o el de Estrella Azahara), a los que no solo no se critican, sino que piden que se potencien y doten, eso sí, coordinadamente. «Estamos hablando, como mínimo, de hacer una intervención a 14 años, a todo lo que significa educar a una generación, desde infantil a la universidad», explica Francisco Povedano, exdirigente sindical y de la HOAC y ahora vocal de Cultura y de Relaciones Institucionales de la AV.
REPORTAJEFe, esperanza y caridad
LO MÁS REALISTA POSIBLE / El plan también tiene unos principios filosóficos, valga el término, ya que, como dice el documento con letras destacadas, «no se ha de elaborar un Plan Integral de los que se saben a priori que no van a ser factibles, se intentará ser realista y pragmático, de cara también a poder ser exigentes en su cumplimiento», Otro concepto básico es «devolver el poder a los vecinos, que se sientan responsables y protagonistas de su futuro y de su barrio», explica Eugenio Rosa, vocal de la AV y del colectivo Stop Desahucios. Un tercer precepto también se fija en el Plan Integral cuando se dice que los vecinos «tienen que creer que el barrio va a cambiar para que cambie realmente».
LO HECHO Y LA HOJA DE RUTA / La buena noticia es que Palmeras no parte de cero. Tiene colectivos que han vertebrado el barrio y ya en 1994, cuando los disturbios por las ocupaciones de viviendas, se trabaja con iniciativas. Cabe recordar en estos años los esfuerzos de la federación Haz tu Futuro o de asociaciones como Nuevo Convivir, así como logros entre los que figuran las continuas inversiones de la Junta en el parque de viviendas o el Plan Integral de Palmeras, que encabezó también la Junta de Andalucía hace década y media. Aparte, el nuevo Plan Integral ya comienza a andar. Sin ir más lejos, la noche del pasado martes Sadeco se reunió con los colectivos y les presentó su proyecto de intervención, igual que hoy tienen previsto presentar a la alcaldesa el Plan Integral.
