El primer día de apertura al tráfico rodado del entorno de la calle Capitulares dejó ayer cierta sensación de novedad y expectativa por el regreso del transporte público al centro y la proximidad de la finalización de las obras de reforma que afectan a esta vía, que comenzaron hace cinco meses y finalizarán, previsiblemente, en febrero. Las fuentes consultadas en el Ayuntamiento de Córdoba informaron de que la primera jornada transcurrió sin incidencias reseñables, aunque la Policía Local tuvo que emplearse en la zona desde primera hora de la mañana, para informar a los conductores de un nuevo plan de tráfico con el que la circulación queda limitada al transporte público y los vehículos autorizados, como ya avanzó este periódico hace días.
El alcalde accidental de la ciudad, Emilio Aumente, señaló que «ha habido bastante normalidad» en el regreso de la actividad, aunque «hay un poco de desconcierto de todos los vehículos que creían que todavía no estaba abierto. Calculo que a partir de los próximos días se irá normalizando la situación». Aumente precisó que «no ha habido ningún conflicto» y también aludió a la escasez de tráfico explicando que «no es un día que tengamos colegios, hay menos movimiento y es una semana bastante proclive al descanso y a las vacaciones. Poco a poco nos iremos adaptando a la nueva movilidad».
En cuanto a la restricción del acceso a este área, el concejal de Movilidad, Andrés Pino, detalló que ayer entraron en funcionamiento las tres cámaras que limitarán el volumen de vehículos (aplicando multas a los conductores incumplidores) en Alfaros, aunque en este caso pueden continuar por Isabel Losa para llegar a Santa Marina; en San Pablo y en Las Tendillas (esta última incide sobre la zona de San Miguel). Con la puesta en marcha de este dispositivo, los coches que entran en la calle Caño y no tienen permiso para continuar hacia el centro deben salir por Osario desembocando en la plaza de Colón.
El concejal de Movilidad coincidió en destacar la normalidad de esta primera jornada, en la que se detectó «mucho tráfico peatonal» y los autobuses de Aucorsa de las líneas 1 (Fátima--Tendillas), 3 (Albaida--Renfe--Fuensanta), 7 (Cañero--Ciudad Jardín--Zoco) y 12 (Naranjo--Capitulares--Sector Sur) llegaron de nuevo al centro, al mismo tiempo que los microbuses retomaron su recorrido. El único incidente fue ocasionado por el derrame de aceite de un autobús en la esquina con Alfaros. Según comentó Pino, este se detuvo en Las Tendillas hasta que los mecánicos solucionaron el problema.
La línea 1 ha reanudado su trayecto al subir desde San Pablo hasta las Tendillas, mientras que la 3, la 7 y la 12 ya no pasan por Capitulares, sino que suben por Alfonso XIII y bajan por Claudio Marcelo hasta Diario de Córdoba y San Fernando. El cambio de sentido en estas calles ha motivado que la parada de autobús ubicada en Claudio Marcelo tenga que pasar a la acera de enfrente, ya que estos vehículos abren sus puertas por la derecha y el estacionamiento existente se encuentra a la izquierda.
El nuevo plan de tráfico afectará de una manera más destacada a la línea 3, por la reducción del tiempo de su recorrido. Además, entre otras modificaciones, la parada de taxis de Claudio Marcelo ha sido reubicada entre las calles María Cristina (que permite la circulación hacia el norte) y García Lovera. Este planteamiento servirá como prueba y podría ser definitivo, ya que el Ayuntamiento baraja peatonalizar completamente Capitulares, aunque la decisión aún no ha sido tomada.
ESCOLARES/ Por otra parte, Andrés Pino se reunió ayer con Alcántara, la empresa responsable del transporte de alumnos de varios colegios de la zona, y avanzó que han acordado mantener los recorridos provisionales iniciados en septiembre. No obstante, próximamente se reunirá con los centros educativos y las familias para estudiar la situación.
