El límite de edad para hacerse donante de médula se sitúa en 55 años. De ahí que el Centro Regional de Transfusión Sanguínea haga un llamamiento a que más jóvenes se hagan donantes de sangre y también de médula, para que así tengan más tiempo de ser solidarios. En mi caso particular he tardado mucho en hacerme donante de médula, apenas hace unos días. Pero no he querido perder la oportunidad de inscribirme en un registro que no cuesta nada, por si alguna vez soy compatible con algún enfermo.