-Las estadísticas del TSJA hablan de un descenso importante del número de desalojos. ¿Están notando en Anfane esa caída?

-Se está notando que hay menos desahucios, eso es una realidad que se da porque para evitarlos se está aplicando el decreto que regula el Código de Buenas Prácticas bancarias. Eso está permitiendo que las familias tengan un periodo de cinco años con una cuota muy reducida y que en la mayoría de los casos se les alargue el plazo para pagar la deuda. Sin embargo, a mí me da miedo imaginar qué va a pasar después de ese periodo. Ahora mismo, se les está dando un respiro, una prórroga en la que, en el mejor de los casos, puedan ahorrar algo para que a la vuelta puedan reducir el capital pendiente. Pero si las familias no encuentran un empleo pronto con un salario digno, estaremos igual en unos años.

-¿Cuántos casos atendieron en la asociación el año pasado?

-Por amenaza de desahucio, a 255 familias, algunas menos que el año anterior. Todos los hemos paralizado, siete con daciones en pago y el resto aplicando el código de buenas prácticas o la renovación del alquiler pactado previamente con los bancos.

<b>-¿Reciben muchos casos de alquileres a particulares?

</b>-A nosotros solo algún caso puntual. Lo que sí vemos es que desde el último trimestre del 2017 los alquileres particulares están registrando un incremento brutal que impide a muchas familias acceder a esas viviendas y tampoco hay vivienda de alquiler público o social. Al precio, se unen los requisitos que piden las inmobiliarias que, para empezar, si no tienes una nómina, te descartan.

<b>-¿Hay muchas familias que se vean en la circunstancia de ser desalojadas una y otra vez?</b>

-Bastantes, porque mucha gente no pidió ayuda ante una ejecución hipotecaria y perdió su vivienda con una dación en pago sin negociar un alquiler social. Las que no recurrieron a un alquiler privado y no han podido mejorar su situación económica, han acabado en la calle más de una vez. El año pasado tuvimos familias desahuciadas hasta cuatro veces de distintas viviendas.

<b>-¿Los bancos están abiertos a negociar caso por caso?</b>

-Los bancos no ofrecen la opción del código de buenas prácticas de oficio, lo hacen cuando presionamos y no leq queda otra, pero hay personas que no conocen esa vía. Los bancos no se pueden negar, pero tampoco ponen de su parte para facilitar las cosas. Además, se exige una cantidad infinita de requisitos y documentación, todo lo que antes no se pedía para firmar la hipoteca, ahora sí que lo reclaman.

<b>-En Anfane rechazan la ocupación de los pisos vacíos de"los bancos. ¿Por qué?

</b>-Porque creemos que antes de eso hay que dar opción a recuperar su casa a las familias que han sido desalojadas. Todo el mundo tiene derecho a una vivienda, pero creemos que deben tener prioridad los que estuvieron pagando su hipoteca durante años y se fueron porque no pudieron hacer frente a la hipoteca. No se pude ocupar pisos vacíos de familias que fueron desalojadas. Todos los derechos conllevan una obligación, no se puede vivir gratis. Hay que pagar luz, agua, un alquiler... La mayoría de los pisos vacíos tienen un dueño que ha sido desahuciado y ese es quien debería volver, creemos que ellos tienen derecho antes que el resto.

<b>-También proponen ayudas públicas para pagar la hipoteca.</b>

-¿Por qué solo hay ayudas para el alquiler? ¿Por qué no ayudar a quienes no llegan a pagar la cuota de su hipoteca para que no se tengan que ir de su casa? ¿Qué diferencia hay?

<b>-¿Cómo valoran el trabajo de la </b><b>Oficina Municipal de la Vivienda?</b>

-Es insuficiente, hay profesionales excelentes, pero quizás falta personal o se intenta abarcar todo en vez de centrarse en el problema de los desahucios, hay que priorizar. Atienden a 1.500 familias al año y han parado 72 desahucios. ¿Y el resto? Hay menos desalojos, pero hace falta más.