Carles Puigdemont está dispuesto a presentarse a las elecciones del 21-D incluso desde Bélgica. Así lo anunció el expresidente catalán durante una entrevista grabada emitida ayer, en horario demáxima audiencia, por la cadena de televisión pública francófona RTBF. «Estoy dispuesto a ser candidato, incluso desde el extranjero», aseguró. «Podemos hacer campaña desde todo el mundo porque vivimos en mundo globalizado», justificó Puigdemont en la conversación grabada con dos periodistas de la cadena. El expresident también indicó que le gustaría que las elecciones autonómicas del 21-D fueran lo más normales posibles, pero mostró sus dudas de que vaya a ser el caso. «No es con un gobierno en prisión que estas elecciones van a ser neutrales, independientes y normales», comentó.

Puigdemont insistió también en que no es normal que los responsables de asociaciones ciudadanas como Omnium y ANC estén en prisión ni que los miembros de su gobierno se enfrenten a 30 años de cárcel. «No es normal que nos enfrentemos a 30 años de prisión por cumplir con nuestro compromiso con los electores. No es normal. Es algo extremadamente bárbaro. No podemos hablar de democracia si debemos jugar con estas reglas del juego», lamentó, haciendo hincapié en que son un gobierno electo «legítimo» y que debería haber continuidad.

«¿De qué sirve la voluntad de los ciudadanos catalanes? Ha sido anulada completamente de forma ilegal por el Gobierno de Mariano Rajoy. Nos han metido en prisión. Esa es la noción del diálogo político. No es la solución, al contrario», añadió, reiterando de nuevo que no está en Bélgica para pedir asilo político, sino para «defender» a un Gobierno que considera legítimo de una «acción ilegal del Estado español», para luchar contra «la ausencia de garantías jurídicas» y actuar «con libertad y en seguridad».

En esa línea, denunció que en España no hay no hay verdadera justicia. «Esta politizada. En menos de 24 horas mis antiguos colegas han sido convocados a Madrid. El abogado ha tenido solo 24 horas para estudiar la demanda de la fiscalía. No hay garantías para tener un juicio justo, independiente, que escape a la presión y la influencia de la política», se quejó, insistiendo en que está dispuesto a colaborar con la verdadera justicia, la de Bélgica.

La intención de Puigdemont de ser candidato llegó tan solo unas horas después de que su partido, el PDECat, propusiera una «lista única de país» en favor de la libertad, la amnistía de los «presos políticos», la defensa de las instituciones y de que Cataluña tenga un nuevo Estado. Así lo explicó la coordinadora general del partido, Marta Pascal, quien, de entrada, no mencionó la declaración unilateral de independencia en la oferta programática, pero dijo que la candidatura asume y avala todo el recorrido hecho por el soberanismo hasta ahora.

LISTA DE PAÍS / Tras la reunión del comité nacional del partido, Pascal defendió así la lista única: «Creemos que hace falta concentrar esfuerzos, creemos que es el momento de una gran lista de país, una gran lista conjunta con la aportación de todos los espacios políticos, de todas las sensibilidades para hacer frente a esta situación tan feroz y chocante que tenemos enfrente». Preguntada sobre quién ha de ser el candidato o candidata a presidir la Generalitat, Pascal dijo que todavía tienen que hablar de ello.

Esquerra, por su parte, se halla aún bajo efecto del shock que supone tener al líder indiscutido, Oriol Junqueras, entre rejas. Frescas están las palabras de este, el jueves, antes de ingresar en Estremera, el centro penitenciario Madrid VII, en las que abogaba porque cada partido construyera su propia lista. En ello están los republicanos, que están manteniendo contactos para conformar una candidatura «amplia» construida «alrededor de ERC». La descripción que facilita una alta voz del partido no se ajusta en demasía con una lista más o menos paritaria entre republicanos y posconvergentes, sino con una en que la viga maestra es única, Esquerra Republicana.