El fuerte peso del olivar en las cuentas agrarias de Córdoba se acentuó durante el pasado año tras la cosecha récord de aceite de la campaña 2013/2014, lo que llevó la producción final agraria a 1.271,8 millones. Esta valoración supone un 36% más que la media de los últimos cinco años y representa el máximo histórico. La aceituna y el aceite afianzaron su protagonismo en el campo cordobés al aportar seis de cada diez euros y ascender su valor a 770,5 millones de euros tras la producción récord de 362.000 toneladas. Precisamente, tras la brusca caída de la campaña 2014/2015, el delegado de Agricultura, Francisco Zurera, avanzó ayer que en el 2015 se producirá un descenso importante de las cuentas del campo cordobés. En su análisis de las macromagnitudes, Zurera advirtió de los bajos precios medios del aceite que se registraron en la provincia durante la campaña 2013/2014, lo que facilitó la venta de todo lo producido y que las exportaciones alcanzaran su máximo (238.000 toneladas). El delegado de Agricultura destacó los aumentos que se dieron en cítricos, cultivos industriales (algodón y girasol) y cereales, aunque también hubo problemas por la crisis de precios que afecta a los cítricos. En el caso de la ganadería, dijo que se mantuvo en los valores de ejercicios anteriores, significando la leche el 49% de este subsector, mientras que el ovino llegó al 17% y el porcino se situó en 16%. La producción final agraria se ha mantenido en la última década en el entorno de los mil millones, descendiendo en el 2009 y en el 2013 por las consecuencias de la baja cosecha de esos ejercicios.

El 82% del valor generado en el campo cordobés procede de la rama vegetal, con 1.041,7 millones de euros, lo que representa una mejora del 46% respecto a la media. Tras el olivar, el cultivo con mayor peso es el cereal, que significa el 7% de la producción agraria, seguida de las hortalizas (3,89%), los cítricos (3,63%), los industriales (2,78%), otros cultivos (1,69%), el viñedo (1,29%) y los frutales no cítricos (1,06%). En el caso de los cultivos herbáceos, entre los que se incluyen los cereales, el girasol, el algodón o las hortalizas, Zurera destacó que se mantuvo en los niveles del 2013, con una aportación de 195,3 millones de euros. El cereal mejoró un 3% su valor y llegó a los 89 millones, mientras que el girasol alcanzó los 29,9 millones y el algodón creció un 25% y se estimó en 5 millones de euros. En Córdoba se sembraron 6.500 hectáreas y se duplicó la producción hasta llegar a 17.500 toneladas.

Por el contrario, se produjeron descensos en las hortícolas, destacando la caída del valor de la cosecha de ajo, que se redujo un 27% y fue de 12,8 millones. La superficie plantada cayó en 300 hectáreas. No obstante, sigue siendo la principal hortícola de la provincia. En el caso de los frutales, cuya cifra económica alcanzó los 59,6 millones, tuvo en los cítricos su principal aportación con 46,2 millones.