Dos pacientes infantiles se han beneficiado recientemente de sendos trasplantes combinados de hígado y riñón en el hospital Reina Sofía, centro que, si bien cuenta con experiencia en la realización de este tipo de intervenciones en adultos, es la primera vez que sus profesionales llevan a cabo estos trasplantes dobles en niños. Además se trata también de la primera ocasión en que se lleva a cabo esta clase de intervención en Andalucía, al ser el hospital cordobés referente para trasplante hepático infantil", resaltó el coordinador de trasplantes del hospital Reina Sofía, José María Dueñas.

Ambos pacientes, una niña de 10 años de Cádiz y un joven de 14 años de Ceuta, han evolucionado satisfactoriamente y se recuperan en casa tras recibir el alta médica después de su periodo de hospitalización -en la UCI pediátrica primero y en planta de pediatría después-. Los dos receptores vuelven ahora a recuperar la normalidad tras pasar más de año y medio conectados a un equipo de diálisis que hacía las funciones de su riñón. "Nos consta que están bien y que han vuelto a la vida, ya que en plena niñez y juventud tenían que acudir 5 días a la semana a diálisis y presentaban restricciones muy severas a la hora de comer. Para poder llevar a cabo esta operación un numeroso equipo de profesionales del Reina Sofía ha estado formándose durante meses", señaló José María Dueñas.

GRAN GRUPO Un equipo multidisciplinar de profesionales integrado por cirujanos, hepatólogos pediátricos y de adultos, intensivistas pediátricos, nefrólogos pediátricos y de adultos y urólogos, entre otros, así como por personal de enfermería especializado, ha trabajado conjuntamente en los últimos meses y se ha formado para asumir este nuevo reto que se llevó a cabo a mediados del verano. De hecho, al joven de 14 años le dieron el alta hace solo unos días.

La amplia trayectoria en trasplante hepático pediátrico y el desarrollo de la nefrología infantil en el complejo sanitario han sido factores claves para poder efectuar estos trasplantes combinados de hígado y riñón, así como también el apoyo facilitado por los integrantes del programa de trasplante renal de adultos. Una vez más, al esfuerzo de estos profesionales se suma el trabajo de las coordinaciones de trasplante del hospital, autonómica y nacional y la generosidad de las donaciones anónimas que han permitido llevar a cabo estas operaciones. José María Dueñas precisó que, al tratarse de niños y además de trasplantes dobles, las intervenciones entrañaban una gran dificultad técnica. Concretamente, en los pacientes infantiles existe mayor riesgo de complicaciones vasculares, lo que obliga a extremar con minuciosidad la técnica quirúrgica. En este sentido, uno de los pequeños precisó un retrasplante con un segundo injerto renal. "Hemos pasado momentos duros con el retrasplante, pero se ha superado perfectamente", añadió Dueñas.