PSOE e IU lograron aprobar ayer los presupuestos de manera inicial, convirtiéndose en el primer ayuntamiento de capital andaluza en hacerlo. El acuerdo alcanzado el lunes con Ganemos proporcionó al gobierno municipal la mayoría suficiente para que el Pleno diera luz verde a unas cuentas que suponen un incremento del 7,8% respecto al año anterior y que ascienden a 427,5 millones de euros en el presupuesto consolidado (de los que 303,4 serán solo para el Ayuntamiento). PSOE e IU tuvieron enfrente a toda la oposición, que no solo votó en contra del documento presupuestario, sino que mantuvo en el debate que éste no se cumplirá. El gobierno local, por su parte, afirmó que son cuentas «centradas en las personas», que apuestan por «una ciudad amable» y que generarán «empleo».

La enmienda a la totalidad presentada por el PP fue rechazada y tampoco salieron adelante las enmiendas individuales presentadas por los grupos de la oposición (9 de Ciudadanos, 7 de Ucor y 19 del PP), que se votaron y se rechazaron una a una (a excepción de una del PP sobre la asignación de los grupos municipales que sí salió adelante); mientras que se aprobaron las 14 enmiendas presentadas por Ganemos y que han sido la base del acuerdo para que este grupo municipal haya pasado de su oposición inicial al presupuesto --la asamblea de la agrupación ciudadana rechazó rotundamente el documento el 18 de diciembre-- al apoyo. Pese a su respaldo, el concejal de Ganemos Alberto de los Ríos insistió en «el incumplimiento del 2016» y advirtió que su grupo estará atento a la ejecución de las cuentas. «Seguiremos vigilantes porque no queremos ser Casandra, que veía venir todos los desastres, queremos ser Clío, aquella musa que tejía y tejía la historia», afirmó.

En su primera intervención, la teniente alcalde de Hacienda, Alba Doblas, agradeció «el espíritu de diálogo» de todos los grupos y, en especial, «la perseverancia» de Ganemos. Afirmó que el aprobado es un «presupuesto de la izquierda porque carga todo en las políticas sociales» y «pone el foco en las personas» y cargó contra la regla de gasto, que tachó de «invento de la mayoría absoluta del PP» y de «ataque frontal al municipalismo». Doblas concretó su afirmación de que el suyo es un presupuesto social diciendo, por ejemplo, que el gasto social se ha quintuplicado de 2015 a 2017, al pasar de 250.000 euros a 1,3 millones. «Si los presupuestos de 2016 fueron los de la recuperación, estos son los de la consolidación de las empresas públicas», afirmó.

Como es habitual, en sus siguientes intervenciones, la responsable de Hacienda elevó notablemente el tono, acusando al PP de «inmoral» al criticar las inversiones previstas cuando las suyas fueron, dijo, «ridículas». De hecho, sostuvo que en los dos ejercicios de este mandato, las inversiones consolidadas ascienden a 73 millones, mientras que en los cuatro años del PP sumaron 75,9 millones. Doblas despachó las enmiendas de C’s sugiriendo que su portavoz, David Dorado, ni se había leído el presupuesto; y respecto a las de Ucor, afirmó que las relativas al carril bici y al comercio están incluidas y que el resto tenía «un difícil encaje».

Contundente en su respuesta fue Emilio Aumente (PSOE), que negó la dos acusaciones recurrentes del PP. La primera, sobre que PSOE e IU carecen de modelo de ciudad: «El único modelo que ha tenido Córdoba ha sido el de la izquierda. Ustedes no tuvieron y por criticar criticaron hasta la obra del Puente Romano», dijo. Y la segunda, sobre que gobiernan solo para media Córdoba: «Eso sería un error, aunque evidentemente lo hacemos desde nuestra ideología que marca las tintas en los que lo están pasando peor».