El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, acudió ayer a los actos institucionales del 28-F en el Teatro La Maestranza de Sevilla, donde aseguró que «el pueblo andaluz debe ser el eje de vertebración de la España de derechos, libertades y oportunidades que ansían la mayoría de ciudadanos». Tras felicitar a los ganadores de las medallas de Andalucía, que para él son «ejemplo de la Andalucía pujante que respalda el gobierno de Susana Díaz», explicó que ambos comparten un objetivo, que es conseguir que Andalucía y España avancen, al tiempo que lamentó «el enfrentamiento de «la derecha española», PP y Ciudadanos. En este sentido, dijo que hay muchos problemas pendientes de solución como para aparcarlos «por intereses electorales de dos partidos que no se entienden y que no dejan avanzar a España».

Para el líder socialista, su presencia en los actos del 28-F es inexcusable. «Estar aquí no es solo una cuestión de formalidad y compromiso político, que también, ya dije hace semanas que iba a venir mucho a Andalucía porque es obligación para un gobernante político que aspira a gobernar España».

El secretario general del PSOE se felicitó por el acuerdo alcanzado para la equiparación salarial de los Cuerpos de de Seguridad del Estado, algo que «el PSOE siempre ha defendido». Asimismo, a preguntas de los periodistas, Sánchez valoró las medidas sobre pensiones planteadas por el ministro de Hacienda, como incluir en los Presupuestos de este año una deducción en la cuota en el IRPF para reconocer los costes inherentes cuando las personas alcanzan una edad muy avanzada, asegurando que se trata de «remiendos y ocurrencias» en lugar de «respuestas», que es lo que están exigiendo los afectados. El líder de los socialistas recalcó que su partido lleva tiempo «alertando del deterioro del sistema público de pensiones y de la pérdida de poder adquisitivo de las pensiones», y que ya en el mes de enero plantearon una propuesta integral de mejora que ha sido «despreciada» por el Gobierno». Para Sánchez, «garantizar un sistema público equilibrado y garantizar el crecimiento de las pensiones al IPC» pasa por racionalizar el gasto público en Seguridad Social y subir los sueldos, ya que «si hay buenos sueldos, habrá buenas pensiones». En la misma línea, ha insistido en la creación de un impuesto a la banca, ya que «un sector rescatado debe ahora ayudar a rescatar el sistema de pensiones».