En la reunión de ayer quedó claro algo que puso de manifiesto la alcaldesa, Isabel Ambrosio (PSOE), el viernes pasado, que también expuso ese mismo día a este periódico el presidente de Rabanales 21, Manuel Pineda, y que ya ha advertido el teniente de alcalde del Ayuntamiento, Pedro García (IU), en alguna ocasión. El centro comercial previsto en Rabanales 21 supone un respiro pero hacen falta soluciones más contundentes para que no se vuelva a repetir la situación actual dentro de un tiempo.

El centro comercial suponía una tabla de salvación, al menos durante un tiempo, para Rabanales 21 y su retraso ha sido un auténtico revés, ya que la sociedad tenía garantizados los pagos hasta final del 2016 y confiaba en contar con el proyecto para principios del 2017 y poder seguir así haciendo frente a los mismos. Tanto Rabanales 21 como el promotor de Rabanales Plaza esperaban tener culminada para principios de año la innovación de PGOU iniciada en el 2014, unos meses después de la salida de la sociedad de la fase preconcursal. De esa manera, Rabanales 21 cerraría el acuerdo al que llegó en el 2014 con el promotor del proyecto, Fernando Villena, recibiendo así los 1,4 millones que faltan para completar la inversión de 2 millones por la que ha sido valorada la parcela comercial.

En la reunión, y según las fuentes consultadas, se valoraron los pasos dados para resolver las observaciones que ha hecho la Delegación territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en su informe a la innovación del PGOU de la parcela comercial iniciada por Urbanismo. Rabanales 21 espera que la Junta responda cuanto antes a la consulta de Urbanismo y se agilicen los trámites que quedan para culminar la innovación de PGOU.