Palma del Río despedía ayer el día en que se conmemoraba el acto central del Mes de la Naranja igual que lo recibía: en alerta y pendiente de la crecida del río Genil. Un cauce que sobre las 19.30 horas se desbordaba y entraba en los pagos de huerta de Pedro Díaz y La Graja, las primeras que se encuentra el cauce a su llegada a la ciudad. Estos pagos están a 7 kilómetros del casco urbano, por lo que la previsión que se manejaba anoche era que la crecida llegase a la ciudad de madrugada por el puente de La Alegría, final del Paseo Alfonso XIII, Callejón del Junco y traseras del Río Seco, por donde transcurre el Genil hasta su confluencia con el río Guadalquivir. A las 21.00 horas el agua seguía avanzando por el camino central de estas huertas y en La Graja.

Las fuertes lluvias de estos últimos días también han elevado de manera considerable el caudal del río Guadalquivir a su paso por la capital cordobesa.

En la estación de Villafranca se llegó a medir a mediodía un caudal de 836,97 metros cúbicos por segundo, cuando la media diaria está en 686,72 metros cúbicos por segundo (m3/s), lo que significa que llevaba más del 20% de agua por encima de lo habitual.

También se detectaba un gran aumento del caudal del río Guadalquivir en la estación de Fuente Palmera, en la que se medían 781,91 metros por segundo cuando la media es de 592,55 m3/s, según datos de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.

Dos personas observan desde el Puente Romano la crecida del Guadalquivir. FRANCISCO GONZÁLEZ

PASARELA CERRADA / Ante esta situación, la Policía Local de Córdoba y los bomberos realizaron tareas de vigilancia preventiva de la crecida de los cauces fluviales del Guadalquivir y el Guadajoz, con patrullas y efectivos en la Estación de Torres Cabrera, las parcelaciones de Guadalvalle y La Altea, y las barriadas de Alcolea y El Ángel. Para evitar riesgos, se precintó la pasarela que discurre bajo el Puente Romano.

Según la información facilitada por la delegación de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento, ayer no se produjeron incidencias de importancia. Por la tarde los cauces bajaron, aunque se mantuvieron durante la noche las revisiones por parte de Policía Local y bomberos.

En Palma del Río, el Genil ya impedía por la tarde el paso a 15 viviendas, propiedades de labor y segundas residencias, en Pedro Díaz. Los vecinos no sabían si el agua se había colado en sus casas, aunque una señora vio pasar «un tonel de mi casa, eso significa que el agua ha llegado a la piscina».

Dos hombres protegen una vivienda para evitar la inundación. ELISA MANZANO

El Ayuntamiento activó a primera hora el Plan de Emergencia nivel 1 con el Servicio Local de Protección Civil y Policía Local y la ayuda de la Guardia Civil. Los vecinos se afanaban en poner a salvo sus enseres, maquinaria y animales. El operativo, con la presencia del alcalde, José Antonio Ruiz Almenara, y el concejal de Servicios Públicos, Pedro Velasco, recorría anoche las huertas para comprobar las inundaciones.