El presidente del PP andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, respondió a las preguntas planteadas por los asistentes a Los desayunos de CORDOBA . A continuación, se incluye la transcripción del coloquio.

--¿Pesa mucho la sombra de Javier Arenas?

--No pesa, yo tengo una herencia en el PP de Andalucía, una herencia de muchos años de historia, un partido con solera, cohesionado, que es el que ha construido Javier Arenas. En el partido solo tenemos palabras de gratitud y de cariño hacia él.

--Hay varias preguntas sobre el compromiso del alcalde de presentarse o no en función del dato del paro en la ciudad. ¿Finalmente va a ser Nieto candidato a la Alcaldía de Córdoba?

--Solo puedo dar mi opinión y es nítida. Nosotros tenemos en la figura de José Antonio Nieto a un gran alcalde, un gran gestor, un gran político y por tanto nuestra referencia electoral en la ciudad de Córdoba se llama José Antonio Nieto.

--¿Qué le parece que en Andalucía gobierne alguien a quien no han votado a los andaluces? Un asistente le recomienda que "para ganar a Susana Díaz tiene usted que ser más animal político, hay que comérsela".

--Está claro que la señora Díaz ha llegado a la Presidencia de la Junta por carambola y que no ha ganado ninguna elección. En el debate de la comunidad hemos visto a una presidenta quemada, que no quería estar allí arriba porque no tiene argumentos, no tiene propuestas y no se siente con la seguridad suficiente. Y lo segundo, si me la tengo que comer... Es verdad que yo tengo un discurso muy sereno. Algunos compañeros me dicen: tienes que ser más duro. Pero, primero, cada uno es como es y, segundo, creo que Andalucía necesita un cambio tranquilo, mucha reflexión y análisis para que se produzca ese cambio sereno demandado por la mayoría de los ciudadanos y que creo que está próximo.

--Hay varias preguntas por la fisura que se ha abierto en el Gobierno bipartito por la legalización de las viviendas ilegales. ¿Cómo valora este desencuentro público que ha habido en el Gobierno?

--Vivimos una constante inestabilidad en el Gobierno andaluz. En los seis meses que llevo de presidente todos los días hay un rumor de posible adelanto electoral, de una posible ruptura de la coalición, todos los días hay una estabilidad más. Creo que se nos hace un flaco favor, que no es positivo para la economía andaluza ni para la sociedad el vivir en una permanente incertidumbre. Por eso le pido a la señora Díaz que controle su gobierno, porque creo que ha perdido el control y no controla a IU. Es un gobierno quemado, sin estímulos, sin rumbo, sin iniciativa y sin ambiciones. Le he pedido que presente un calendario de Gobierno, para que sepamos qué va a hacer, pero aún no sé cuál es ese programa de gobierno a día de hoy.

--¿Cuál es su opinión sobre el debate de la titularidad e inmatriculación de la Mezquita?

--Yo creo que estamos ante un debate irreal. La administración andaluza, más que una solución, es un obstáculo y una gran máquina de crear problemas a los andaluces. Llevo muchos años visitando Córdoba y nunca he visto una polémica tan compleja, tan artificial y tan alimentada desde el poder político. Creo que Andalucía necesita tranquilidad, estabilidad y centrarse en los problemas prioritarios sin introducir polémicas absurdas. Esto es un problema creado por la Junta, que nos lo crea a los andaluces y no es capaz de resolver, igual que las viviendas ilegales o el Algarrobico, problemas que la propia Junta de Andalucía ha creado. Sinceramente, creo que estamos ante una polémica estéril y que la Junta debería dedicarse a otras cuestiones mucho más importantes y atender a las peticiones ciudadanas en lugar de dedicarse a buscar polémicas solo por tener un titular.

--¿Cómo cree que será la conformación del próximo Parlamento? ¿Pactaría con alguna otra fuerza para gobernar Andalucía?

--La situación en Andalucía es muy abierta en este momento. En las dos últimas encuestas que se han hecho, una es la Egopa, a la que llaman el CIS andaluz y está financiada por la Junta de Andalucía, se hizo en julio y daba un 7,07% de ventaja al PSOE. La última la ha hecho la Cadena SER nacional y daba en torno a un 2,9%. Ahora mismo en Andalucía hay un empate técnico. La señora Díaz ha perdido en un año seis puntos. Por eso cuando decía en el debate sobre la comunidad que los andaluces ya le conocen yo dije "sí, ya te conocen y mira cómo va la cosa". Ha perdido seis puntos por problemas de gestión. Andalucía está paralizada, los ciudadanos dicen que hay una administración que no funciona, sin iniciativa, que no resuelve problemas, sin ambición de futuro. El panorama en este momento es muy abierto. Yo voy a trabajar para construir una mayoría social que nos permita gobernar en Andalucía. Si esa mayoría social no se alcanzara y hubiera fuerzas políticas que coincidieran con nuestro modelo de cambio, porque lógicamente no voy a pactar con alguien que quiera seguir haciendo lo mismo, por supuesto que podríamos entablar un diálogo y llegar a un acuerdo para cambiar de una vez la realidad de esta comunidad.

--¿Cómo valora la actitud del Gobierno andaluz en el tema de los ERE?

--Comete un grave error porque la señora Díaz y su gobierno permanentemente huyen del parlamento. Cuando uno no tiene miedo y tiene las ideas claras no tiene por qué no enfrentarse a lo que estatutaria y constitucionalmente tiene obligación que es ir al Parlamento a dar explicaciones. Creo que ha cometido un enorme error y por eso ha bajado en intención de voto el PSOE no acudiendo al Parlamento como el PP le ha pedido para dar la cara, a explicarnos cuál es la situación de los ERE. A decir a quién implica, a quién no, qué se conocía, qué no, cuánto dinero vamos a poder recuperar, qué elementos se están introduciendo para que jamás vuelva a ocurrir algo así. En mi opinión, hay una enorme opacidad en el Gobierno andaluz. Hemos registrado más de 700 peticiones de información que se niegan a tramitar. Por eso, cuando la señora Díaz sale a la tribuna y dice que hay un antes y un después y que está haciendo una revolución desde el punto de vista de la regeneración ética y democrática, falta a la verdad.

--¿Cree que la gastronomía o el turismo son un motor económico andaluz?

--El turismo es clave. Andalucía tiene dos motores ahora mismo, el sector agroalimentario y el sector servicios. En turismo, somos una gran potencia y por eso tenemos que mimarlo, protegerlo y en el caso de Córdoba estamos en una provincia con un enorme margen de crecimiento. La Junta debe llegar a acuerdos con Diputación y ayuntamientos para hacer campañas conjuntas de promoción. El sector privado y el público tienen que empujar en la misma dirección porque tenemos todas las cualidades para dar un salto de calidad, para traer no solo más turistas, sino turistas con más nivel adquisitivo que se dejen más dinero y valor añadido en Córdoba. Ese es uno de los pilares básicos que yo quiero proteger y mimar en mi futuro gobierno.

--La última tiene que ver con la realidad empresarial. ¿Se terminará la discriminación positiva de las cooperativas respecto al resto de empresas cuando gobierne usted?

--Tenemos un mundo cooperativo muy atomizado que ha sido mimado y protegido porque las cooperativas están en todos nuestros pueblos. Pero tenemos que buscar más dimensión de esas cooperativas. Hay empresas privadas que no son cooperativas y tienen una gran pujanza y están haciendo grandes cosas por el sector. Las cooperativas tienen que mejorar, ganar músculo y sobredimensionarse y debemos proteger a las empresas privadas en el sector agrícola que están aportando desarrollo y valor añadido.