El Gobierno andaluz aprobó ayer, tres meses después de anunciarlas, la mayoría de las medidas presentadas el pasado mes de marzo dentro de un plan de choque urgente contra el paro con una dotación económica de 500 millones de euros y una previsión de 46.000 nuevos empleos hasta final de 2014.

La medida más novedosa es la puesta en marcha de un bono joven dotado con 400 euros al mes (una ayuda anual de 4.800 euros) que complementará el salario de los menores de 35 años que obtengan su primer empleo. Según informó ayer el consejero de Economía, Antonio Avila, un total de 3.125 jóvenes se beneficiarán de esta ayuda, que podrá solicitarse de inmediato tras su publicación en el BOJA (que se espera para hoy) y en el plazo de un mes tanto por vía telemática como en las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo.

Los solicitantes entrarán a formar parte de una bolsa entre quienes se elegirá a los beneficiarios en un plazo de dos meses. Los jóvenes deben estar en paro pero la ayuda solo se hará efectiva cuando el demandante obtenga su primer contrato laboral, que debe ser a tiempo completo, por un mínimo de doce meses y contar con un salario acorde al convenio de la empresa, que deberá acreditar la creación de nuevos puestos de trabajo. Si el contrato se extinguiera o el joven fuera despedido, podrá mantener la ayuda durante un plazo máximo de tres meses y prorrogarla si encuentra otra oportunidad laboral. Si no, dejará de cobrar el bono. No se valorarán los empleos logrados a través de empresas de trabajo temporal.

Este plan, que difiere de las habituales ayudas a la contratación que ofrecen las administraciones al no dirigir los incentivos a los empresarios sino al trabajador, trata de facilitar una primera oportunidad laboral a universitarios, graduados de Formación Profesional y a jóvenes que volvieran a estudiar Secundaria dentro del llamado plan de segunda oportunidad, que se puso en marcha para devolver a las aulas y dar una formación a los miles de jóvenes andaluces hoy parados que salieron de la escuela para trabajar en la construcción. El índice de paro juvenil en Andalucía es una lacra que roza hoy el 65% y está entre los más altos de España y Europa.

AUTÓNOMOS // El Gobierno andaluz también aprobó un paquete de medidas de apoyo a los autónomos dotado con 51,17 millones de euros y que incentiva contratos indefinidos, la cobertura de bajas de maternidad y ayudas para pagar hasta la mitad de la cuota correspondiente de la Seguridad Social durante dos años. Este plan complementa el aprobado por el Gobierno central la pasada semana. Se anima a los parados a que se autoempleen con incentivos de hasta 2.000 euros y una cuota mensual de 50 euros durante dos años para pagar las cotizaciones.

BECAS Y EXTRANJERO // Se prevén asimismo ayudas de 6 millones de euros para las cooperativas y la economía social, bonificando también las contrataciones. En otra línea de ayudas, se becará a 100 jóvenes, que podrán ser también titulados de FP, para que hagan prácticas en el extranjero. Estas ayudas serán de 4.800 euros anuales. Otro objetivo del plan es que los universitarios se lancen a emprender proyectos empresariales, para lo que se dispondrán 100 millones de euros de fondos reembolsables (créditos a bajo interés que deberán de ser devueltos) y la posibilidad de que se otorguen ayudas a fondo perdido para pagar la letra de esos préstamos.

El PP-A respondió ayer con duras críticas: "El Gobierno de Mariano Rajoy aprobó su plan de emprendedores un viernes. El sábado estaba en el BOE y el lunes se aplicaban las medidas. El Gobierno andaluz lleva tres meses". El aviso del presidente del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido, puso el foco sobre la lentitud con la que la Junta ejecuta un plan de choque concebido ante una situación de emergencia, con un índice de paro del 37% y hasta el 65% para menores de 35 años. Zoido advirtió ayer al Gobierno andaluz de que el paro requiere "celeridad" y criticó su "obsesión" de gobernar "buscando la foto, anunciando las mismas medidas una y otra vez". El dirigente del PP-A denunció que la lucha contra el paro es "incompatible con la lentitud y la falta de dinamismo de la Junta". El popular recetó varias medidas a la Junta: que pague a los proveedores, que deje de bloquear proyectos empresariales importantes en las ciudades y que "no ponga a Andalucía en peligro dejándole las riendas del Gobierno a IU".

Ante estas críticas, el consejero de Economía, Antonio Ávila, denunció la "escasísima altura de miras" del PP y pidió al principal partido de la oposición que tenga "la decencia política de reconocer lo que se hace". El consejero de Economía volvió a mostrar su apoyo al plan para emprendedores aprobado por el Gobierno central y reclamó al PP andaluz esa misma actitud con el plan de empleo de la Junta. "La situación es tan complicada que los partidos y las administraciones deberían de tener más alturas de mira", insistió Antonio Avila.