Una gran sorpresa y otra que cada vez lo es menos. Las convocatorias de Djukic y de Ancelotti incluyeron ayer a dos jugadores jóvenes, con corta experiencia y de trayectorias muy, muy diferentes. Son José Fran y Alvaro Medrán.

La convocatoria del jugador del filial del Córdoba es circunstancial, como explicó el técnico cordobesista. Casi un parche para tapar la salida de Xisco al Mallorca, que ayer se oficializó. Estas navidades fue la primera vez que se le vio ejercitándose con el primer equipo, en una sesión plagada de jugadores del filial ante la incertidumbre de lo que pasaría con los descartados en el mercado invernal, las lesiones y los que aún no habían vuelto.

Se trata del máximo goleador del equipo de José Antonio Romero, junto con Juanfran. Lleva tres goles en 20 partidos. Nacido en Santa Pola, tiene 23 años y llegó el pasado verano al Córdoba. Se desenvuelve por la banda izquierda, aunque en ocasiones se intercambia con Dani Hernández. Menos se le ha visto actuar por detrás del punta.

El alicantino ha pasado de jugar la semana pasada contra el Marbella, en Segunda División B, a estar citado para el choque ante el Real Madrid, el vigente campeón del mundo. Otra cosa es que se vista de corto porque, como dice Djukic, "todavía puede mejorar".

El merengue de Dos Torres

Fede Vico no será el único con acento cordobés que mañana salte a El Arcángel. En el Real Madrid estará el cordobés Alvaro Medrán.

El de Dos Torres, por quien suspira el Córdoba, cuenta con la confianza de Ancelotti que le va dando minutos, aunque está jugando mucho más con Zidane. En el Castilla lleva cinco goles. Debutó en Primera División ante el Celta, el mes pasado, pero antes ya había jugado en Copa del Rey y había formado parte de la expedición madridista en pretemporada, cuando jugó en Estados Unidos la Guinness International Champions Cup. Y es que Medrán tiene trayectoria internacional pese a sus 20 años. Jugó en Champions ante el Ludogorets, con gol incluido.

En definitiva, dos jugadores jóvenes con una trayectoria muy diferente que poco a poco se van ganando la confianza de sus respectivos entrenadores. Aunque lo normal es que mañana ambos tengan que aguardar su oportunidad desde el banquillo.