Susana Díaz, presidenta de la Junta, afirmó ayer que el Gobierno andaluz «seguirá invirtiendo en el relevo generacional», en garantizar que sea una realidad que los jóvenes quieran incorporarse al sector agroalimentario, «que lo van a hacer aportando valor añadido», siendo un ejemplo en esa investigación e innovación, «de la mano de la universidad», promoviendo la transferencia de conocimiento al tejido productivo.

La presidenta, que asistió al acto conmemorativo del 50 aniversario de la empresa Antonio Cano e Hijos en Luque, abogó también por seguir apoyando la modernización, la incorporación de las mujeres y por seguir ganando tamaño para ser fuertes en el mercado. Resaltó que «Andalucía es la única comunidad que dedica parte de los fondos de desarrollo rural a la apuesta por el sector ecológico, al relevo generacional y a seguir innovando».

Recordó que el sector agroalimentario de Andalucía es una referencia en calidad y en excelencia. «Andalucía tiene un mar de olivos que nos permite que el 40% de la producción global de aceite de oliva virgen extra sea andaluz». Y que en el año 2017 se hayan batido récords en exportaciones, alcanzado los 3.700 millones de euros en ventas y que 130 países hayan «escogido Andalucía y su sello de calidad como su referencia». Ello ha sido posible «porque tenemos un sector potente, de empresas que siguen innovando, ganando tamaño y mercados, internacionalizando e invirtiendo en I+D+i».

«El olivar andaluz ha permitido fijar la población al territorio, generar oportunidades, ser capaces de garantizar la igualdad de oportunidades y calidad de vida y hoy hay 250.000 familias que viven de este sector», ha agregado.

Sobre el futuro de la PAC, la presidenta de la Junta reafirmó el compromiso diario y permanente del Gobierno andaluz por seguir acompañando al sector del olivar y al agroalimentario, especialmente en un momento en el que «nos estamos jugando muchísimo» por la nueva Política Agrícola Común. «Hemos hecho las cosas bien», ya que las empresas agroalimentarias han apostado por ganar tamaño, por la modernización y por la internacionalización y hoy «somos competitivos en el mundo por la calidad de nuestros productos».

Susana Díaz advirtió de que «el impacto que puede tener la futura PAC en Córdoba y en el resto de Andalucía va a ser importante» y reclamó «sensibilidad al Gobierno de España y al resto de instituciones europeas» en el debate sobre su reforma.

Díaz afirmó que el 2018 es un año fundamental y se comprometió a que en septiembre se reunirá con el sector del olivar andaluz para que «aquellas incertidumbres y retos que tengamos en el horizonte lo convirtamos en una oportunidad».

La presidenta de la Junta, acompañada por la alcaldesa y vicepresidenta primera de la Diputación de Córdoba, Felisa Cañete, y el presidente de la institución provincial, Antonio Ruiz, recorrió durante su visita a Luque las instalaciones tanto de la fábrica de harinas como de la almazara y la envasadora de Antonio Cano e Hijos y fue la encargada de descubrir una placa conmemorativa en el patio principal de la almazara.