La familia de Iluminaciones Ximénez, los únicos cordobeses premiados en esta gala del Día de Andalucía (además de los miembros correspondientes del Plan Infoca, que abarca todo el ámbito andaluz), vivieron ayer con entusiasmo una jornada de felicidad en la que no olvidaron a los que ya no están. Francisco Jiménez, segunda generación de la empresa que «dio el salto de su tienda al mundo», como recordó la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, en alusión a quienes han decorado con sus bombillas ciudades de 40 países, dedicó emocionado la medalla «a los familiares y a los trabajadores que ya no están». Su hijo se mostró también ilusionado: «Estamos muy contentos por este reconocimiento a la empresa, para la que será un impulso, este es un Día de Andalucía especial en el que nos sentimos muy orgullosos». Bien arropado, el empresario de Puente Genil tuvo un recuerdo especial para los fundadores de la empresa. «Estamos muy felices e ilusionados, pero cuando te dan un galardón de esta categoría te acuerdas de los fundadores, que fueron mis padres, pero también de la familia que ha vivido nuestras ausencias por la cantidad de viajes, y lógicamente de los trabajadores y de los que se quedaron en el camino, que también forman parte de este galardón”, dijo sincero. Las críticas expresadas en días pasados por IU en relación con la falta de adecuación del convenio de sus trabajadores no parecieron empañar la celebración de una medalla sobre la que, dijo, «ya hubo rumores el año pasado». Acabada la gala, la familia Ximénez al completo se trasladó al hotel Alfonso XIII para disfrutar de un ágape.