La estrategia del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont de huir a Bélgica no le va a suponer más que un retraso para comparecer en la Audiencia Nacional. La jueza Carmen Lamela ordenará hoy su arresto y el de los cuatro miembros del depuesto Gobierno que le acompañan en su exilio voluntario en Bruselas, informaron fuentes jurídicas. La decisión de la magistrada se ha aplazado a hoy debido a que, además de haber tomado declaración al exvicepresidente catalán Oriol Junqueras y al resto del Ejecutivo cesado, al que ha enviado a prisión, se encuentra de guardia esta semana en la Audiencia Nacional. Eso supone que también es ella quien debe encargarse de todas las euroórdenes cursadas y otras diligencias que surjan.

Una vez terminadas las declaraciones y las vistillas para la imposición de medidas cautelares, el teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Miguel Ángel Carballo, presentó un escrito en el que instaba a la jueza a ordenar la busca y captura y detención nacional e internacional de los cinco. También reclamó la emisión de órdenes europeas de detención dirigidas a las autoridades belgas. La petición fiscal se dirige contra Puigdemont y los exconsellers Meritxell Serret, Lluis Puig, Toni Comín y Anna Ponsatí para que sean detenidos y puestos a disposición judicial.

Según las fuentes consultadas, el juez al que corresponda la euroorden en Bruselas deberá decidir si deben ingresar en prisión mientras se decide su entrega. De ahí que exista la posibilidad de que con su marcha a la capital belga no solo no haya evitado su ingreso en la cárcel madrileña de Estremera con los demás exmiembros de su gabinete, sino que pueda entrar en la de otro país por unos días.

El ministerio público basa su petición en que «es un hecho notorio y públicamente conocido su citación para comparecer en el día de hoy a declarar como investigados» por un delito de rebelión y no han comparecido. Además, asegura que constan reiterados intentos de citación en su domicilio y reiteradas llamadas telefónicas «a las que han hecho caso omiso». Asimismo, destaca que ni Puigdemont ni Comín ni Serret, que han solicitado formalmente declarar por videoconferencia desde Bruselas, han ofrecido ningún dato sobre su paradero, por lo que no ve obstáculo alguno para proceder a su arresto. Lo que sí facilitó anoche Puigdemont fue un vídeo a TV3 en el que hacía ver su indignación por los encarcelamientos de los exconsejeros. «Es un golpe contra las elecciones del 21 de diciembre, que se desarrollarán en un clima de represión y encarcelamientos inaceptable en la Europa democrática del siglo XXI», afirmaba en su breve discurso. «La libertad de Cataluña no es posible si hay catalanes que no son libres de defender sus ideas y cumplir con sus compromisos democráticos». «Nos espera una represión larga y feroz», añadía en su mensaje.