Una de las exigencias puestas sobre la mesa por los empresarios en relación con el desarrollo empresarial de la ciudad es la de activar los polígonos situados junto a la autovía A-4, como son La Rinconada y El Álamo.
El primero de ellos es fruto de la colaboración entre la Junta y el Ayuntamiento con los propietarios del suelo. El Álamo es una inciativa privada. Ambos espacios tienen la tramitación urbanística muy avanzada, con sus planes parciales aprobados, pero no han seguido desarrollándose. Por eso, Antonio Díaz señaló que el problema del desarrollo industrial no procede de la escasez de suelo, sino en muchas ocasiones de la falta de agilidad administrativa para ponerlos en carga.
Desde el Ayuntamiento se apostó por un nuevo espacio logístico, próximo a El Higuerón y al actual Parque Logístico, pero también desde el empresariado se señaló que activar ese proyecto en estos momentos supondría esperar otros diez años hasta que se pudiera poner en marcha el aprovechamiento del mismo.
A estas activaciones de más suelo industrial se une la necesidad de redimensionar la distribución de las parcelas actuales del centro logístico para dar cabida a otras empresas de más envergadura que actualmente no tienen cabida, lo que impidió que se instalaran en Córdoba empresas que han tenido intención de hacerlo, según dijo Antonio Díaz, quien también se refirió al abandono de un proyecto que tenía para Córdoba Red Eléctrica.
La alcaldesa destacó que para reactivar el potencial logístico y empresarial de Córdoba es necesario activar la oficina del inversor que dé más agilidad a las gestiones, impulsar la marca logística de Córdoba, desarrollar espacios con dimensiones de parcelas que permitan instalaciones de mayor envergadura y diseñar y poner en marcha un protocolo de colaboración entre todos los entes implicados. Además, apostó por mirar hacia el futuro, mostrándose convencida de que trabajando todos juntos se podrán lograr los objetivos perseguidos.
En relación con esta colaboración, desde CECO se considera necesario fortalecer el pacto firmado en su momento por los empresarios, la Diputación y el Ayuntamiento, al que debería unirse también la Junta de Andalucía, y desde el mismo potenciar la marca logística.
Por su parte, el consejero defendió que la logística se debe concebir como red y no como puntos aislados, rechazando que Antequera sea una competencia para Córdoba, con la que volvió a mostrar el compromiso de apoyo para su desarrollo.
