La falta de oportunidades en el mercado laboral y otros efectos de la crisis económica sobre la población y las empresas cordobesas han provocado que la cifra de emigraciones al extranjero se triplique desde el inicio de la crisis económica, dejando en la provincia 2.392 salidas a otros países durante el año pasado, frente a las 778 registradas en el ejercicio 2007.

La Estadística de variaciones residenciales, publicada recientemente por la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta, indica que Córdoba ha seguido la tendencia mantenida en Andalucía en los últimos siete años, donde también han aumentado los traslados de residencia a otros países, aunque en la comunidad autónoma solo han crecido un 73% y se han situado en 46.552.

En los dos casos, no obstante, llama la atención el peso significativo que las personas de nacionalidad extranjera han tenido en estos movimientos migratorios, ya que si en la provincia representan el 77% del total de los que salieron de España, a nivel regional aquellos ciudadanos que son oriundos de otro país y que deciden volver a cambiar su lugar de residencia suman el 81%. Por otra parte, los emigrantes de nacionalidad española representaron en Córdoba el año pasado el 23% del total y en Andalucía no llegaron al 20%.

Desde el comienzo de la crisis económica, la emigración de extranjeros y españoles ha subido en la misma proporción en la provincia (multiplicándose por tres), pero a nivel regional ha crecido más la española (casi se ha triplicado) que la de personas foráneas (que se ha elevado un 60%). En este sentido, el investigador del Instituto de Estudios Sociales Avanzados del CSIC Rafael Serrano explica que "la gente se va a causa de la crisis", que, en su opinión, es el "único elemento transversal" que afecta a las vidas tanto de españoles como de extranjeros.

En referencia a la situación de los emigrados que se encontraban en Córdoba, este sociólogo comenta que "por la naturaleza de la inmigración que hemos tenido, pienso que se trata más de un retorno (a su tierra) que de un cambio de país", y cita como ejemplo el regreso a Ecuador de personas de esta nacionalidad que ya no encuentran oportunidades en la provincia.

JOVENES De otro lado, la información del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía también pone de relieve que el 42% de los ciudadanos que decidieron ir a vivir al extranjero el año pasado tenía entre 20 y 34 años de edad. Otro grupo destacado fue el de personas de entre 35 y 39 años, que concentró el 13% de las emigraciones, y el de 40 a 64 años de edad sumó casi una cuarta parte de las salidas realizadas desde Córdoba, aunque hace siete años suponía el 18%, seis puntos porcentuales menos que en la actualidad.

Al ser preguntado por las causas que están motivado el traslado a otros países de residentes en Córdoba, Rafael Serrano destaca que "está clarísimo" que estas se encuentran relacionadas con las dificultades del mercado de trabajo, ya que tiene "una incapacidad absoluta de absorber a la población activa y, sobre todo, a aquellos que se van incorporando a la población activa". Este sociólogo alude a la "frustración horrible" de jóvenes que no pueden emanciparse, en un contexto en el que "estamos sobreespecializando los puestos de trabajo", dando lugar a una situación en la que "si tengo una tienda de electrodomésticos, puedo pedir a un ingeniero industrial".

En esta línea, hace hincapié en que las personas que están viajando a otros países para buscar

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