Jesús María fue el alumno con mejor nota de la última prueba de Selectividad LOE celebrada en Córdoba el año pasado, con un 13,895. Desde el primer momento, lo tuvo claro, quería estudiar Relaciones Internacionales y convertirse en diplomático y aunque había cursado sus estudios previos en la escuela pública se decantó por la Loyola Andalucía. «Me planteé irme a Madrid o Barcelona, tampoco hay muchas opciones para esta carrera en España, pero decidí quedarme en Loyola porque me ofrecía la oportunidad de disfrutar de una beca por mis notas», explica. Una vez dentro, lo que ha encontrado no le ha defraudado. «Estoy en primero y la verdad es que estoy encantado, el salto a la universidad ha sido mucho mejor de lo que me esperaba, las clases me parecen fantásticas porque analizamos mucho la actualidad, entramos en los temas en profundidad y aunque es un temario denso lo estoy disfrutando», afirma. A punto de examinarse del C1 de inglés, pronto retomará su francés y quiere probar con «algún idioma asiático, no sé si chino o japonés». Aunque mantiene la idea de la diplomacia, parece haber descubierto un campo que desconocía antes. «La Cooperación al Desarrollo es un área que me atrae mucho también, hay mucho por hacer y tampoco la descarto como una salida laboral». En su cabeza, sigue teniendo presente la Selectividad. «Me parece fatal la incertidumbre de este año y creo que los cambios han sido negativos, pero aconsejo a los estudiantes que vayan tranquilos, al final es un examen más y cuando lo acabas, toda una liberación».