Ironías del destino. O quizás no, ya que posiblemente los archivos son la parte más sensible de la Mezquita--Catedral al fuego. En todo caso, el primer simulacro de incendio de la historia de la Mezquita--Catedral se planteó con el foco del incendio en la zona de la Sacristía y el Archivo. Curiosamente, fue en el Archivo, aunque el principal, que se encuentra junto al Mirhab, donde el 6 de julio del 2007 se produjo un incendio auténtico que calcinó 25 cajas de legajos (sobre todo libros y documentos de contabilidad del siglo XIX) de las 5.000 existen, según valoró en su día el canónigo archivero, Manuel Nieto Cumplido.

Aunque gracias a la rápida actuación de los bomberos y del personal de seguridad los daños fueron "muy pequeños", decía el entonces dean Alonso García Molano, la noticia del incidente cayó como un mazazo en Córdoba, incluido el Pleno del Ayuntamiento, que justo en esos momentos, cuando el fuego se detectó a las 13.20 horas, celebraba una sesión plenaria. En aquella ocasión los sistemas de detección de humo y seguridad también funcionaron a la perfección, evitando una catástrofe.