La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, reiteró ayer en Córdoba que se ha hecho «una gran injusticia con Andalucía» con las ayudas de la Política Agraria Común (PAC), de las que se ha hecho «un reparto caprichoso» y que «maltrata» a la comunidad autónoma. Díaz, que remitió el miércoles al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, una carta para hacerle llegar su descontento por esta circunstancia, ha afirmado que «estamos pidiendo lo que es nuestro, es decir, no pedimos que nadie nos dé nada, simplemente que se nos respete lo que nos corresponde». En esta línea, la presidenta andaluza exigió al Gobierno de España «que tenga ahora la sensibilidad que le ha faltado hasta el día de hoy con los productores y los agricultores andaluces».

La presidenta andaluza y secretaria del PSOE-A hizo estas declaraciones durante la visita que realizó ayer a mediodía la Feria de Córdoba, acompañada por el presidente del Parlamento andaluz, Juan Pablo Durán; la consejera de Cultura, Rosa Aguilar; la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio; el presidente de la Diputación, Antonio Ruiz, y la delegada del Gobierno andaluz en Córdoba, Rafi Crespín, entre otros. Díaz explicó que en la carta le hace ver a Rajoy varias cosas: «Que entienda la importancia que la PAC tiene para Andalucía, ya que aquí el 8% de nuestra riqueza está en el sector agroalimentario, que uno de cada dos empleos que se crea está ligado a ese sector, que hay 500.000 andaluces que viven de una manera o de otra de ese sector, lo que supone la cuarta parte de la producción de España, por eso no se justifica el reparto que se ha hecho», dijo.

Asimismo, Díaz explicó que en la misiva le ha pedido al presidente del Gobierno dos cosas más. Por un lado, «que piensen lo que han hecho con aquellos que reciben menos de 5.000 euros en ayudas, que se les ha quitado lo mismo que a quienes reciben millones en ayudas, y eso no es justo, es la primera vez que pasa y nadie lo entiende». Y, por otro lado, que hay de plazo hasta el próximo 1 de julio «para corregir un agravio que se ha hecho con los agricultores andaluces», ya que «se les ha dejado fuera de las ayudas asociadas en ámbitos que para nosotros son clave». En este sentido, Susana Díaz recordó que han quedado fuera de las ayudas determinadas producciones que son «menos productivas y más complicadas de mantener», como son los casos del olivar de sierra y del olivar de pendiente, el de la uva pasa o el del trigo duro.

Tampoco quiso olvidar la presidenta, que las ayudas de la PAC no han tenido en cuenta la producción de remolacha que tiene Andalucía, hasta el punto de que «nuestros productores de remolacha pierden la mitad, respecto a otras comunidades autónomas».

La Junta de Andalucía ha cifrado las pérdidas del campo cordobés en el nuevo marco comunitario en 109,7 millones de euros hasta 2020. A esta partida habría que unir los recortes en los fondos al desarrollo rural, con lo que Córdoba se convierte en la segunda provincia española que sufrirá un mayor recorte, solo superada por Jaén.

El Ministerio de Agricultura, por su parte, acusa a la Junta de falsear las cifras e insiste en que hasta el 30 de junio no se conocerá el dinero recibido por la PAC. Además mantienen que la negociación de las nuevas ayudas comunitarias ha evitado aplicar una tasa plana que hubiera perjudicado, fundamentalmente, a Andalucía y, en especial, a Jaén y Córdoba, y que los ingresos se hubieran reducido en más de 450 millones anuales.

BRINDIS CON MORENO // La presidenta de la Junta, Susana Díaz, también respondió al ofrecimiento del presidente del PP-A, Juanma Moreno Bonilla, de brindar con ella «por Andalucía» en la Feria de Córdoba. Ambos dirigentes regionales coincidieron (aunque sin verse) en El Arenal. Díaz respondió al ofrecimiento diciendo que está dispuesta a brindar con Moreno Bonilla, siempre que éste le pida al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, que corrija el reparto que ha hecho de las ayudas de la PAC, al entender que dicho reparto perjudica a Andalucía.