Más de un centenar de personas acudieron al homenaje a Fosforito, que conserva una legión de seguidores pese a haberse retirado hace diez años. Con el corazón dividido entre Córdoba y Málaga, donde reside, el cantaor sigue venerando a la ciudad desde donde se catapultó a la fama y siempre dedica palabras de cariño a su Puente Genil natal. Junto a cantaores como El Pele o David Pino, asistieron la concejala de Cultura, Mar Téllez, y el vicepresidente de la Diputación, Salvador Blanco.