La situación está mejorando ligeramente, pero aún así los jóvenes cordobeses siguen teniendo un gran problema en la provincia para acceder a un puesto de trabajo y para conservarlo. La destrucción de empleo por la crisis económica se ha paralizado, pero el deterioro de las condiciones en las contrataciones se mantiene. El último informe anual del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) sobre el mercado de trabajo en los jóvenes refleja que el 45,89% de los menores de 30 años de la provincia estaban en el paro durante el 2015, un porcentaje ligeramente superior a la media andaluza (45,55%). La provincia de Cádiz, donde el 51,51% de sus jóvenes está en el desempleo, es la provincia andaluza donde existe más dificultad para trabajar, seguida de Jaén (49,92%), Sevilla (48,41%) y Córdoba. Por el contrario, Almería es la provincia donde hay menos paro en los jóvenes, con un porcentaje que se queda en el 38,52%.

El informe de la Junta refleja que en el 2015 la población joven entre 16 y 29 años se situaba en 128.600 personas, un 1,98% menos que en el 2014. De ellos, 68.200 era población activa y 31.300 estaba en el paro, lo que supone un 12,81% menos que un año antes, según la EPA. Este descenso del desempleo en el último año es mayor que el registrado en Andalucía (-9,99%). También ha crecido el número de jóvenes ocupados hasta llegar a 36.900, un 1,93% más que en el 2014. La tasa de paro también ha mejorado en los dos últimos años después de que en el 2013 alcanzara su cifra más alta con el 54% y en el 2014 fuera del 49,86%.

ALTA TEMPORALIDAD

Como sucede con el resto de colectivos, los jóvenes también están muy afectados por la temporalidad de los contratos que firman, siendo muy reducidos los indefinidos que se logran hacer. Durante el pasado año, según datos del Servicio Andaluz de Empleo (SAE), firmaron 139.681 contratos, de los que 136.511 fueron temporales (97,73%). Solo 3.170 fueron indefinidos (2,26%). Detrás de esta precariedad se encuentran los dos principales sectores económicos que generan empleo en la provincia (servicios y agricultura), que están muy afectados por la estacionalidad. Servicios generó 69.176 contratos para los jóvenes, un 8,27% más que en el 2014, mientras que agricultura permitió 54.059, un 9,9% menos que un año antes. El tercer sector en contratación fue industria, con 8.479 acuerdos laborales, y el último fue la construcción, con 7.967. Salvo en la agricultura, en el resto de sectores se incrementó la contratación para los jóvenes.

Las ocupaciones en las que se hicieron más contratos en la provincia fueron las de peones agrícolas, con 42.610 empleos, seguido de los camareros (19.464 contratos), vendedores en tiendas y almacenes (6.087), peones de las industrias manufactureras (3.510), trabajadores cualificados de la agricultura (2.982), monitores de actividades recreativas (2.941) y peones agropecuarios (2.907). Por nivel formativo, el 56,8% de los empleos fueron para jóvenes con estudios secundarios. En segundo lugar destacan los jóvenes con estudios primarios, que suponen el 23,8%.