Los expertos en patrimonio mundial, su gestión y difusión, que participaron ayer en la primera jornada del congreso internacional en torno a Medina Azahara defendieron los valores excepcionales del yacimiento arqueológico cordobés para convertirse en Patrimonio de la Humanidad. Esta reunión de especialistas, que durará hasta el sábado y en la que participarán representantes de ciudades califales de Jordania, Irak, Argelia y Líbano, también puso sobre la mesa los problemas a los que se enfrentan estos lugares y sus reponsables respecto a su conservación, protección y gestión, entre otros aspectos, así como la situación de España en este ámbito, ya que es el tercer país con más elementos incluidos en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, un total de 44. La consejera de Cultura, Rosa Aguilar, inauguró ayer en la sede institucional del yacimiento arqueológico el congreso Medina Azahara y las ciudades islámicas patrimonio mundial , que tiene entre sus objetivos dar el impulso definitivo a la inclusión del conjunto arqueológico en la lista de Patrimonio Mundial. También servirá este foro para aglutinar experiencias y reflexiones "muy útiles en el trabajo que día a día desarrollamos en Medina Azahara", continuó Aguilar, así como para afrontar "los retos y desafíos en nuestro anhelo de lograr el reconocimiento por parte de la Unesco de sus valores excepcionales", lo que "fortalecerá el trabajo que estamos desarrollando para alcanzar ese objetivo".

Las ponencias comenzaron con la intervención de Elisa de Cabo de la Vega, subdirectora general de Protección de Patrimonio Histórico del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, que, tras reconocer los valores excepcionales de la ciudad palatina, centró su conferencia en la situación en España en materia de patrimonio. A su juicio, nuestro país es una potencia en bienes inscritos en la lista de Patrimonio Mundial, pero también "es un reto" porque "queremos ser punteros en cuanto a la gestión de estos bienes".

Por su parte, Begoña Bernal, presidenta de Icomos España, consideró que no ve ninguna "debilidad" en Medina Azahara en su aspiración al título, y habló de los peligros de tener tanto patrimonio porque "el problema es que, una vez que se tiene, da lo mismo, no pasa nada y se puede hacer lo que se desea". A su juicio, el mayor de los incovenientes es que "solo se quiere lograr entrar en la ansiada lista para aumentar el número de turistas, que, aunque se valora como turismo cultural, en realidad lo que se quiere es que sea de masas".

NUEVOS CRITERIOS También fueron alabados los valores del yacimiento por parte del director del Patronato de la Alhambra y el Generalife, Reynaldo Fernández Manzano, que señaló que es "uno de los monumentos más singulares, se merece esa calificación, y estoy convencido de que lo va a conseguir". Durante su intervención, subrayó que desde la declaración como Patrimonio de la Humanidad de la Alhambra en 1984 se produjo una revolución en cuanto a los criterios de conservación que se conocían hasta entonces. Por último, el director de la Oficina de Gestión del Conjunto Histórico de Córdoba, Pedro Caro, repasó los instrumentos legales con los que cuentan las administraciones y las acciones llevadas a cabo desde el ámbito municipal en la búsqueda de una gestión sostenible.

Aguilar estuvo acompañada en la apertura de este congreso por la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, y el presidente de la Diputación, Antonio Ruiz. Ambrosio destacó que en este congreso "podemos repensar y reflexionar, junto con autoridades académicas y patrimoniales, sobre dónde están los valores fundamentales de esta ciudad palatina que nos puedan hacer conseguir esa declaración mundial". Por su parte, Ruiz afirmó que "el conjunto arqueológico forma parte de nuestra identidad", asegurando que "con esta candidatura hablamos de colocar nuestra cultura y a Córdoba como referente turístico gracias al valor de Medina Azahara".