Por primera vez en las 26 ediciones de la Feria en El Arenal, ni el alcalde ni ningún cargo público en su nombre participó en la clásica ceremonia de encendido del alumbrado, dejándosele este honor al Coro Paz y Esperanza, como símbolo de que el acto lo asume "el pueblo de Córdoba", explicó el portavoz del gobierno local, Miguel Angel Torrico. Esta medida también tuvo razones políticas, ya que se pretendía "evitar suspicacias" y polémicas por si alguien interpretaba el encendido del alumbrado por parte del alcalde como un acto electoralista. El encendido coincidió con protestas por parte de miembros de la Acampada Dignidad y de la plataforma contra la privatización del alumbrado público, que increparon al alcalde y a los que un cordón policial impidió el acceso a la Caseta Municipal.