La próxima edición del festival de Eurovisión, que se celebrará en Lisboa con el eslogan Todos a bordo, contará con 42 países participantes, entre ellos Rusia, que el año pasado no actuó en los escenarios de Kiev por las tensiones diplomáticas con Ucrania por la anexión ilegal de Crimea, en el 2014.

Las autoridades ucranianas prohibieron el año pasado la entrada en el país a la candidata rusa, Yúlia Samóylova, por haber actuado en Crimea. Y, por ello, los rusos boicotearon el concurso.

El pasado abril, el director general del Canal 1 de la televisión rusa, Konstantín Ernst, dijo que Samóylova sería la representante de Rusia en el 2018 y que así lo habían acordado con la Unión Europea de Radiodifusión (UER), organizadora del popular certamen y que este miércoles ha confirmado el regreso de Rusia.

El festival también será especial para Suecia, ya que participará por 60ª vez en Eurovisión, según ha destacado la UER en un comunicado.

Portugal acogerá por primera vez el certamen después de que Salvador Sobral ganara el año pasado en Kiev y proporcionara a su país la primera victoria en 53 años de participación en Eurovisión.

Conexión con Europa

Las semifinales tendrán lugar los días 8 y 10 de mayo, mientras que la final se celebrará el día 12. El tema de la edición, Todos a bordo para Eurovisión 2018 , tiene que ver con la manera en que Portugal conecta Europa con el resto del mundo a través del mar, y con el hecho de que hace 500 años Lisboa fue el centro de muchas de las rutas marítimas más importantes del mundo.

Como novedad, en esta edición habrá varios logotipos de Eurovisión a partir de la concha que figura en el principal, en los cuales se abordarán temas clave como la diversidad, el respeto y la tolerancia. "Durante siglos, Portugal ha explorado el mundo a través del mar. Hoy Lisboa es más y más la ciudad de todos los colores, un gran puerto de culturas y sonidos que invita a todo el mundo a venir a bordo", ha señalado el director creativo de la radiotelevisión lusa RTP, Gonçalo Madaíl.