“Son las diez de la mañana del lunes 11 de diciembre de 2017, muy buenos días. Aquí, À Punt, la radio pública de los valencianos y las valencianas”. Estas han sido las primeras palabras de los nuevos medios de comunicación de la Comunidad Valenciana. La periodista Jèssica Crespo ha sido la encargada de poner voz al inicio de “un día histórico, porque la ciudadanía valenciana vuelve a tener medios de comunicación públicos en nuestra lengua, para poner en valor nuestras cualidades y particularidades”.

Antes de iniciar el magacine ‘Al Ras’, el contenedor social, cultural y económico que será el buque insignia de la programación de la radio, Crespo ha realizado un pequeño manifiesto fundacional de cuatro minutos en el ha recordado que "a los valencianos se nos impuso un silencio hace ahora cuatro años”, en referencia al abrupto cierre de los medios que decidió el Gobierno del popular Alberto Fabra. “Ya hace unos meses que trabajamos para romper este silencio y hoy tenemos palabra, música, canciones y muchas ganas de convertirnos en imprescindibles en las vidas de nuestros vecinos”, ha explicado.

La locutora ha desgranado algunos puntos del “ADN de À Punt, una especie de contrato social que no nos queremos saltar”. Ha señalado que se tratarán “todo tipo de temas, con calidad y rigor, con respecto a la audiencia y sus protagonistas” y que se guiarán por “los principios de veracidad , accesibilidad, imparcialidad y pluralidad”. En el menú de su primer programa se incluía un debate sobre la gestación subrogada y la presencia del cocinero ‘Michelín’ Ricard Camarena y del cantautor Pau Alabajos.

Crespo ha anunciado que la página web, con contenido infantil incluido, estará lista la próxima semana “y más adelante, televisión”. Pero nadie se atreve a poner una fecha concreta. La idea es comenzar con una parrilla completa de televisión y sobre las bolsas temporales de trabajo pesa el riesgo de una suspensión cautelar, pues la Unió de Periodistes (la asociación mayoritaria) y la Asociación de la Prensa de Alicante han presentado un recurso por entender que era excesivo el ‘premio’ a los extrabajadores de RTVV en el baremo de acceso.

Al no existir aún una redacción de informativos y deportes, no está claro cuando empezarán las emisiones de televisión y la radio ha empezado con una programación de mínimos y externalizada. Se trata de una decena de programas (solo dos de ellos de lunes a viernes) que realizan productoras, pero que estarán bajo la supervisión del departamento de control de contenidos y programas de ‘’À Punt’. Música, cocina, mascotas, literatura, medioambiente, lengua, educación infantil e, incluso, un programa para niños. Y el resto, música de grupos valencianos y, sobre todo, en la lengua propia.

Amàlia Garrigós trabajó en Ràdio 9 en sus 24 años de existencia y ahora presentará ‘Territori Sonor’, el otro programa diario de À Punt y recuerda que producción externalizada “es un eufemismo: es privatizada”. Pero admite que el modelo tiene ventajas y desventajas. “No hay posibilidad de sinergias, porque cada programa se hace en un sitio y, aunque haya una coordinación, no es lo mismo”, apunta. “Pero, por otro lado, a mí me ha permitido configurar mi propio equipo, con gente muy joven que viene de otros mundos, y estoy en una productora fantástica que me cuida mucho”, explica. Y admite, también, que esto ayudará en parte a revitalizar un sector que ha pasado “mucha sed” estos cuatro años.