Creyeron que iban a sacar una buena tajada con unos cupones premiados, pero fueron víctimas del timo del tocomocho y perdieron, entre ambos, unos 5.000 euros. Estos hechos serán vistos en juicio en junio en el juzgado de lo Penal 3 y en el banquillo se sentarán dos acusados, para los que el fiscal solicita penas de cuatro años de prisión para cada uno por dos delitos de estafa.

El primer timo ocurrió la mañana del 20 de enero del 2011, en Poeta Ibn Zaydun. Según relata el fiscal en su escrito, ambos acusados abordaron a un hombre de 72 años. Uno de ellos le preguntó por una dirección y, haciendo que no conocía al otro, entabló una conversación ante la víctima en la que le preguntó por la dirección de la ONCE, al mismo tiempo que le enseñaba tres cupones. El timo estaba en marcha.

Uno de los acusados le advirtió rápidamente de que estaban premiados, que por cada uno de ellos correspondían 20.000 euros y, por si había dudas, incluso enseñó una lista con el resultado del sorteo. Una vez captado el interés de la víctima, convencieron al hombre de que les entregara 3.000 euros a cambio de los cupones, le acompañaron a una entidad bancaria y obtuvieron el dinero. En ese momento le entregaron un paquete, que supuestamente contenía dinero, y un pañuelo con los cupones. Su sorpresa fue que, una vez que se marcharon, solo tenía en su poder recortes de periódico.

El otro golpe, prácticamente calcado, lo llevaron a cabo, según el fiscal, en Sevilla, en abril del mismo año. En esta ocasión la víctima fue un hombre de 71 años al que le hicieron creer que tenían unos números premiados con el cuponazo y que le querían regalar uno. Eso sí, debía darles 2.000 euros. El hombre no dudó. Fue a una entidad bancaria, sacó esa cantidad y se la entregó. Uno de los supuestos timadores hizo como si juntara el dinero con otro suyo para devolvérselo junto a los cupones. Pero nada más lejos de la realidad. Lo que hizo fue cambiarlo por un sobre lleno de recortes de periódico y apoderarse de los 2.000 euros. H