La sección Tercera de la Audiencia provincial de Córdoba ha condenado a 12 años de cárcel a un hombre de 70 años de edad por abusar sexualmente de su nieta desde que esta tenía unos cinco años hasta que cumplió 13 años.

La sentencia recoge que los abusos finalizaron cuando la madre de la menor descubrió lo que hacía el procesado con su hija. También indica como hecho probado que el delito se produjo, en un primer momento, en la isla de Menorca y más tarde en la localidad de Priego de Córdoba, donde la víctima convivió con sus abuelos junto al resto de su familia.

El texto señala que "una vez comprobaba que estaban todos dormidos, se dirigía a la cama de la pequeña y le quitaba el pijama y las braguitas", y le realizaba tocamientos. También apunta que este comportamiento continuó hasta que una noche la menor "comenzó a llorar, pidiéndole que parara".

Su madre, que había llegado a la casa, subió al dormitorio de la niña "a la que vió tumbada boca abajo, llorando, por lo que le preguntó qué le ocurría, contándole la niña lo que le venía haciendo el acusado". Horas más tarde echaron al procesado de la vivienda y lo llevaron al aeropuerto para que tomase un vuelo de regreso a la isla.

El abuelo ha sido condenado por un delito de abuso sexual continuado a doce años de prisión. Además, se le ha impuesto la prohibición de aproximarse durante el tiempo de la condena a una distancia inferior a 500 metros o comunicarse con la joven, o acercarse a su domicilio a menos de 500 metros durante trece años. Junto a esto, tendrá que indemnizar a su nieta con 20.000 euros.