Los animales silvestres se han reducido en el mundo un 52% desde 1970, bastante peor que el 28% estimado en el año 2008, según muestra un gran estudio sobre 3.038 especies y un total de 10.380 poblaciones que han encabezado la asociación ambientalista WWF y la Sociedad Zoológica de Londres (ZSL). El informe, que se hizo público ayer, analiza los efectivos totales -no el número de especie-, de las cinco grandes clases de vertebrados (peces, aves, mamíferos, anfibios y reptiles) e identifica las causas, todas de origen humano, desde la deforestación para agricultura, hasta la acidificación de los oceános, el cambio climático, la contaminación, los cambios en el uso de la tierra, las sequías o el furtivismo. Los humanos, en definitiva, han rebasado la huella ecológica que la Tierra podría soportar de forma duradera.

El estudio muestra que los anfibios son los más afectados, con una reducción de sus efectivos del 76%, debido esencialmente a la destrucción o fragmentación de sus hábitats, la contaminación y la llegada de especie invasoras. En el caso de los mamíferos, el retroceso se estima en un 39%, motivado por el avance de la agricultura y la construcción de infraestructuras para generación eléctrica. Por regiones, entre las peor paradas destaca América Latina, que ha perdido un 80% de su fauna vertebrada, y algunos mares tropicales.

GRANDES ICONOS El análisis muestra que los animales más afectados no son los grandes iconos de la conservación, como los tigres de Nepal o los gorilas de los Grandes Lagos africanos, cuyas escasas poblaciones suelen estar recluidas pero protegidas en parques nacionales, sino algunos animales menos mediáticos como el gibón hoolock, el lobo etíope, la tortuga laúd, la anguila europea, la foca moteada, la perdiz, el hipopótamo o el pez martillo. Frente al descenso global del 52%, el retroceso en áreas protegidas es del 18%. "La magnitud de la pérdida de biodiversidad y de ecosistemas esenciales para nuestra existencia es alarmante", dijo Ken Norris, director científico del ZSL. "La protección de la naturaleza necesita una acción centrada en la conservación, la voluntad política y el apoyo de las empresas".