Felipe VI, en su primer discurso como rey en una ceremonia de entrega de los Premios Príncipe de Asturias, reclamó ayer un "impulso moral colectivo" en una España que permanezca "alejada de la división y la discordia" tras haber conseguido que sus ciudadanos no sean ya "rivales unos de otros".

Para conseguirlo, recordó que el respeto al marco constitucional "es la garantía de nuestra convivencia en libertad", e instó a mirar "a nuestra historia" con "serenidad, objetividad y sabiduría".

"Somos protagonistas de un mismo camino", proclamó el Rey en la ceremonia de entrega de estos galardones, que convocó para 2015 ya como Premios Princesa de Asturias, con lo que se acomoda su denominación a la actual heredera de la Corona, Leonor de Borbón y Ortiz.

Ante 1.600 invitados entre los que se encontraban la reina Sofía; la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría y los ministros de Fomento, Educación y Exteriores, Ana Pastor, José Ignacio Wert, José Manuel García-Margallo, respectivamente, el Rey pidió cuidar la vida en común de los españoles sin repetir errores del pasado.

Acompañado por la reina Letizia, don Felipe lanzó mensajes sobre la conveniencia de que los españoles reconozcan sus "intereses y valores comunes", el "caudal de progreso" conseguido "con el empuje de todos" y preserven la "comprensión", el "afecto" y el "respeto" mutuos.

UN ESTADO SOCIAL La democracia española, enfatizó, "no es fruto de la improvisación, sino de la voluntad decidida del pueblo español de constituir España en un Estado social y democrático de derecho" donde todos, "ciudadanos e instituciones", recalcó, "estamos sometidos por igual al mandato de la ley".

Junto a este mensaje, tuvo Felipe VI palabras de reconocimiento para todos los galardonados en esta 34 edición, entre ellos para la periodista congoleña Caddy Adzuba, Premio de la Concordia, que hizo un encendido alegato para evitar la impunidad de la aún no terminada guerra de su país, que ha costado la vida a seis millones de personas y la violación de medio millón de mujeres.

También tomó la palabra el hispanista francés Joseph Pérez (Ciencias Sociales), que ensalzó la contribución de España en defensa de la justicia, y el escritor irlandés John Banville (Letras), que aseguró que la frase es la invención más trascendental de la humanidad.

Por su parte, el químico Avelino Corma (Investigación) reivindicó el papel que deben jugar los científicos para conseguir una sociedad más justa y respetuosa con un planeta que debe transmitirse a las futuras generaciones en las mejores condiciones.