El PSOE ha presentado este viernes en el Congreso una proposición del ley que busca garantizar el cobro de una pensión por parte de los hijos de víctimas de violencia machista que, actualmente, dependen de que su madre asesinada haya tenido unos mínimos de cotización a la Seguridad Social a lo largo de su vida.

La portavoz socialista de Igualdad, Ángeles Álvarez, ha advertido que, de media en España, cada semana se suma un huérfano por violencia de género a las estadísticas y "muchos de ellos no reciben una prestación a pesar de las reformas legislativas que se han venido haciendo has ahora".

Álvarez se refiere a la modificación realizada en 2015 por el PP, que permite que los huérfanos por violencia machista sean considerados huérfanos absolutos (de madre y de padre) y pasen de cobrar el 20% de la base reguladora de la madre, al 52%.

Sin embargo, esta pensión sólo se cobra en el caso de que la víctimahaya cubierto unos mínimo de cotización a la Seguridad Social, los mismos que los de cualquier otro huérfano: si está dada de alta o en situación asimilada al alta, haber cotizado 500 días en los últimos 5 años, y si no está dada de alta tener, al menos, 15 años cotizados.

La proposición que ahora presentan los socialistas buscan eliminar estos requisitos, en gran medida porque, como ha señalado la diputada "muchas de las víctimas de esta violencia son expulsadas del mercado laboral precisamente por sus circunstancias personales". De este modo, el PSOE propone que los hijos cuyas madres no han cotizado a la Seguridad Social tengan una pensión garantizada de 677 euros.

AUMENTA LA CUANTÍA

Del mismo modo, también buscan que aquellos que sí están cobrando esta prestación tengan un aumento de la misma. Es decir, que su pensión se eleve hasta el 70% de la base reguladora de la madre. Finalmente, en el caso de que la víctima tuviera más de un hijo, se aplicaría el 118% de la base reguladora, a repartir entre los menores. "Así se equipara la cifra a las pensiones de viudedad", apunta Álvarez.

Todos estos supuestos excluyen a los asesinos de las víctimas de violencia de género, dado que los padres pierden la patria potestad de los hijos tras ser condenados, por lo que no cuentan con su pensión. Pero, en el caso de que el padre se quite la vida o fallezca, los hijos sí sumarían a esa pensión mínima o al 70% de su madre, el 20% de la pensión de su padre.

En cuanto a la duración de esta prestación, se les aplica la establecida a cualquier otro huérfano, según la Seguridad Social. Es decir, hasta los 21 años, en el caso de que el joven ya esté cobrando el sueldo mínimo interprofesional o hasta los 25 años como máximo.

ESPERAN UNANIMIDAD EN EL CONGRESO

La portavoz del PSOE de Igualdad ha señalado que esta iniciativa, que se debate el próximo martes en el Pleno del Congreso, busca corregir unas modificaciones que "son insuficientes" porque muchas de las mujeres asesinadas "ya sea por edad o por sus circunstancias personales no llegaban a la cotización mínima suficiente que abriera la puerta a sus hijos para cobrar esta prestación del Estado.

Durante su intervención, Álvarez ha apuntado que espera que esta propuesta de ley se tome en consideración por unanimidad por parte de la Cámara Baja, incluidos los diputados del PP. En este sentido, ha señalado que desde el Gobierno no se puede poner laexcusa presupuestaria para que la norma salga adelante.

Según ha indicado, "en estos momentos los asesinos de víctimas de violencia de género no cobran pensión de viudedad, de manera que las aportaciones que el Estado tendría que hacer a los viudos pueden pasar a la partida de pensiones de orfandad, para cubrir los derechos que se quieren garantizar con esta reforma".