Nueva York y sus alrededores recuperaron ayer el ritmo tras la tormenta invernal del jueves, aunque para las próximas horas se espera un brusco descenso de las temperaturas por una ola de fío polar que afecta al noreste de Estados Unidos. La tormenta se desató desde primera hora del jueves y hasta media tarde, y afectó con gran fuerza a la zona de Long Island, a lo largo de la costa atlántica, y con un impacto menor en Manhattan y en la costa de Nueva Jersey.

En Nueva York, el distrito escolar mayor de Estados Unidos, las escuelas públicas reanudaron sus actividades, aunque en muchas de ellas el acceso a los centros educativos quedó dificultado por la nieve acumulada.

La imagen de personas limpiando la nieve acumulada en las últimas horas en las aceras, y el trabajo de los quitanieves en calles y carreteras fue la más frecuente durante el día de ayer tanto en Nueva York como en los alrededores del área metropolitana.

Según datos del servicio meteorológico, a lo largo del jueves llegaron a caer en Central Park, el principal punto de referencia meteorológica de la ciudad, cerca de 25 centímetros de nieve. Sin embargo, en partes del condado de Suffolk, en Long Island, llegó a caer hasta la tarde del jueves, cuando se redujo la intensidad del temporal, casi medio metro de nieve.

El temporal, acompañado de vientos fríos de origen polar, afectó a todo el noroeste de Estados Unidos, aunque con especial impacto en los estados de Nueva York, Connecticut y Nueva Jersey.

ESTADO DE EMERGENCIA / Las autoridades declararon el estado de emergencia en Nueva York y otras zonas de la región más afectada y alertaron sobre el riesgo de que continúen los problemas por los vientos y la brusca caída de las temperaturas que se esperan para el sábado.

Según el Servicio Meteorológico, a causa de la ola de frío ártico «se espera una sensación térmica peligrosamente baja para los próximos días, con algo de nieve». La previsión para Nueva York es que a primera hora del sábado la sensación térmica baje hasta los -31º C y que durante ese día se mantengan unas temperaturas muy bajas.

En las últimas horas se ha informado de la muerte de tres personas por incidentes vinculados a este temporal, en una lista que se alarga y que ya lleva contabilizadas 26 víctimas mortales en el Noreste de EEUU. Además, se han producido centenares de accidentes de tráfico por conductores que pierden el control de sus vehículos a causa de la escasa visibilidad o el hielo en calles y carreteras.