Científicos del centro WYSS de neurotecnología han desarrollado un dispositivo que facilita la comunicación sencilla a pacientes con "síndrome de cautiverio". Se trata de un casco conectado a unos sensores que se conectan a un ordenador.

La tecnología no es novedosa, pero sí el uso que se le ha conseguido dar. Los investigadores han descubierto qué zona del cerebro se activa si las respuestas del paciente son síes o noes. El enfermo piensa una respuesta y la máquina es capaz de interpretarla.

Se llama "síndrome del cautiverio" al estado en el que entran los pacientes que han tenido un tipo de ictus que afecta a la zona del tronco cerebral que controla el movimiento. No pueden moverse ni hablar, sin embargo oyen, ven y son conscientes de todo lo que ocurre a su alrededor. El resto de su cerebro está activo, por eso es tan importante que sean capaces de comunicarse, aunque solo sea con un "sí" y un "no".