Más de 200.000 personas han disfrutado en la XX edición del festival Viña Rock de Albacete. Al margen de valoración de los grupos participantes, el éxito de público y económico del encuentro está fuera de toda duda, con unos ingresos estimados para la ciudad de entre 16 y 18 millones de euros en los cuatro días de conciertos.

El menú musical ha abrumado, como suele ser habitual en este tipo de macroconciertos. Más de 120 bandas repartidas en ocho escenarios, con más horas de música, y un pretendido equilibrio entre las grandes bandas de siempre, bandas emergentes y bandas noveles, y en cuyo cartel, más de la mitad de ellas nunca habían participado en el festival. Y es que los festivales son la vía de supervivencia de buena parte de los profesionales de la música en España, tras la crisis del mercado discográfico.

ATRACTIVO TURÍSTICO

David Sánchez, de Reacción Rock, organizador de los conciertos mantiene el idilio con el alcalde de la ciudad, Valentín Bueno, el concejal de Cultura, Bernardo Ortega, y el director del festival, Juan Carlos Gutiérrez, configurando un equipo que ha dado a la ciudad uno de sus emblemas turísticos. Las cifras manejadas por Viña Rock sorprenden no solo en el número de bandas participantes. Más de 1.400 personas han velado por la seguridad de los asistentes, se han acreditado más de 350 medios de comunicación del país, y se ha contado con asistentes de toda la geografía española, y Reino Unido, Alemania, Francia, Italia y Estados Unidos, entre otros países.